Una inversión adicional del 2% del coste de construcción de un inmueble en el aislamiento adecuado de puertas, ventanas y demás cerramientos permitiría ahorrar hasta un 20% de consumo de energía en los hogares, según datos del Grupo Euroconsult, especializado en ingeniería de consulta y control de calidad.
El estudio, realizado con objeto de mostrar el impacto económico de un adecuado control de calidad en el sector de la edificación, revela que las reparaciones que habitualmente realizan los propietarios o inquilinos de un inmueble para subsanar la falta de calidad de las obras de edificación suponen un 12% del valor de construcción de la vivienda.
Euroconsult considera que la Ley de Ordenación de la Edificación (LOE), que entró en vigor en el año 2000, ha marcado un punto de inflexión en la calidad de la edificación residencial en España. Con esta normativa, se ha generalizado el control técnico de la cimentación y estructuras de los edificios, pero se ha perdido exhaustividad en la frecuencia y alcance del mismo.
Por otro lado, Euroconsult afirma que la calidad de la construcción residencial en España está a la altura de Europa, aunque los problemas se centran fundamentalmente en las condiciones de habitabilidad donde no se ha desarrollado el seguro que incluía la LOE para garantizar el perfecto acabado de los pisos.
En este sentido, el estudio muestra que las patologías más frecuentes que registran las viviendas en España son las humedades y filtraciones, así como la falta de aislamiento térmico y acústico, lo que favorece ruidos aéreos, de impacto, reverberaciones, etc., causando graves molestias a los usuarios.
Según esta consultora independiente de control de calidad, actualmente las viviendas promovidas por las diferentes Administraciones Públicas están en general mejor controladas y con un acabado más adecuado. Finalmente, añade, como conclusión, que una vivienda nueva debería perdurar al menos dos generaciones.