La Xarxa De Ciutats i Pobles cap a la Sostenibilitat presentó la semana pasada en Barcelona un modelo de ordenanza sobre ahorro de agua y eficiencia elaborado por la Fundación Ecología y Desarrollo.
El objetivo de este documento es ofrecer un modelo de ordenanza para ayudar a los municipios a regular tanto la incorporación como la utilización de sistemas ahorradores de agua, así como la adecuación de la calidad del agua al uso que de ella se realiza en edificios, otras construcciones y actividades y determinar en qué casos y circunstancias será obligatoria. Contempla las diferentes facetas de ahorro potencial que los municipios pueden conseguir. No obstante, cada uno de ellos, en función de sus características propias, tiene la posibilidad de elegir o adaptar todas o parte de las obligaciones o recomendaciones descritas en este documento.
La creciente demanda de agua está ligada indisolublemente al aumento del número de habitantes, hecho que implica la sobreexplotación de los recursos hídricos y el consecuente deterioro del medio ambiente. Por este motivo, es necesario establecer una base normativa que permita el uso correcto y el ahorro de este recurso. Con este objetivo, la presente regulación debe aplicarse sobre la base de la evolución de la técnica, utilizando la mejor tecnología disponible con los materiales menos nocivos para el medio ambiente.
Todas las medidas de ahorro de agua requieren una mínima contabilidad del recurso hídrico. Sin conocer la cantidad de agua que introducimos en la red de distribución resulta imposible valorar la eficacia del ahorro, por elloconsideramos imprescindible la instalación de contadores en todos los nudos o puntos clave de la distribución. Este es un paso previo, sin el cual resultan superfluos todos los demás, ya que aún cuando se trate de medidas de obligado cumplimiento, sin una contabilidad básica del agua no seríamos capaces de comprobar su resultado.
En cuanto a las medidas concretas que se proponen, la ordenanza quiere aplicar conceptos innovadores como el aprovechamiento y la reutilización de agua y propone una serie de medidas a implantar, de manera progresiva, para hacer un uso más eficiente del agua. Se proponen mecanismos ahorradores de agua como aireadores, reguladores de caudal o inodoros de doble descarga; pero la ordenanaza pretende ir más allá y apuesta por aplicar otras medidas ahorradora como la recogida de agua de lluvia, la reutilización de aguas de ducha para los inodoros, la reutilización de agua sobrante en las piscinas, sistemas de riego más eficientes y la aplicación de criterios de xerojardinería en el diseño de parques.
Otra de las ideas clave es la adecuación de la calidaddel agua a su uso; para cada actividad que requiera un consumo de agua se destinará con la calidad y características que correspondan al uso que se quiera hacer. Por lo tanto, debe entenderse la adecuación de la calidad del agua en función de si el consumo es humano o se trata de otros usos que no necesitan un agua de estas características (como la destinada al riego de parques y jardines, a la limpieza de interiores, exteriores y herramientas de trabajo, o la propia para llenar los depósitos de los inodoros, entre otros).
La presentación corrió a cargo de Nuria Buenaventura, diputada del Área de Medio Ambiente y Presidenta de la Xarxa De Ciutats i Pobles cap a la Sostenibilitat.
La Fundación Ecología y Desarrollo ha asesorado y apoyado técnicamente a diversas administraciones públicas como el Gobierno de Cantabria, el Ayuntamiento de Vitoria, el Gobierno Balear o el Ayuntamiento de Zaragoza, en materia de uso eficiente del agua.