Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) y Petrocat han firmado un convenio por el que se llevará a cabo una prueba de funcionamiento en los autobuses urbanos de la capital catalana con biodiésel como combustible.
La prueba, que podría iniciarse hacia el mes de mayo de este año, tendrá una duración de seis meses y afectará a un total de quince autobuses de líneas regulares que tienen como base operativa la cochera de Ponent.
El objetivo de la prueba es evaluar las ventajas e inconvenientes operativos de este nuevo combustible ecológico aplicado en autobuses urbanos y, en concreto, en la ciudad de Barcelona.
Según el acuerdo, los quince vehículos utilizarán Bio 10 Petrocat, una mezcla de gasóleo tradicional y biodiésel producido íntegramente en Cataluña por la petrolera catalana Petrocat. Los autobuses que participen en esta iniciativa incorporarán un distintivo muy visible desde el exterior.
El biodiésel, un combustible renovable y menos contaminante
El biodiésel es un combustible ecológico derivado de aceites vegetales y de aceites residuales de frituras. Es biodegradable, genera menos emisión de humo y agentes contaminantes, lubrifica los motores y cumple con todas las normativas establecidas.
La prueba piloto con biodiésel se incluye en la apuesta de TMB por el respeto hacia el medio ambiente y la prevención del cambio climático. De este modo, hacia finales de año el 25% de la flota de autobuses de TMB funcionará con gas natural. Asimismo, TMB sigue participando en el proyecto CUTE de experimentación con pilas de hidrógeno.