El primer barrio sostenible de Castilla-La Mancha surge del concurso internacional de ideas EUROPAN, en el que el Gobierno de Castilla-La Mancha, como miembro promotor, en su sexta convocatoria propuso este ámbito para desarrollar un modelo urbanístico que permitiera conjugar el espacio construido, el espacio público y el paisaje, en unos terrenos escasamente desarrollados y de difícil integración urbanística dentro del Polígono Residencial Santa María de Benquerencia, en Toledo.
El Ecobarrio de Toledo es un proyecto diseñado por tres jóvenes arquitectos, Carlos Arroyo, Eleonora Guidotti y Manuel Pérez Romero, con la coordinación del jefe de servicio de Programación e Inversiones de la Consejería de Vivienda y Urbanismo de Castilla-La Mancha.
En junio de 2001, su apuesta urbanística para la capital regional resultó ganadora del concurso internacional de ideas EUROPAN 6, al que concurrieron otros 54 equipos de toda Europa, y hoy se exhibe en múltiples y prestigiosas revistas del sector así como en importantes certámenes creativos, como la Bienal de Venecia.
La localización del Ecobarrio
El área de actuación del ecobarrio se localiza en la Fase V del Polígono de Sta. María de Benquerencia de Toledo. Este Polígono es, hoy por hoy, el barrio más populoso de Toledo, con 20.000 residentes censados –cerca del 30 por ciento del padrón municipal- y uno de los núcleos de mayor proyección social, económica y urbanística de la capital castellano-manchega.
El despegue residencial de este área, dotada con una superficie de 657,5 hectáreas, se remonta a las grandes actuaciones de promoción pública iniciadas durante la década de los años 60, cuando se empezaron a construir las primeras casas para los trabajadores de la zona. Desde esa época, y gracias a la intervención de Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, el Polígono no ha dejado de ampliar sus infraestructuras y aumentado su parque público de viviendas.
Sin embargo, la distancia que sigue separando a este barrio del centro de la ciudad (5-8 km), la falta de continuidad urbana, sus limitados accesos por carretera (sólo por la N-400) y su propia fisonomía industrial (alterada, además, por una lenta y desigual reconversión), hacen necesario un replanteamiento general de la zona.
¿Por qué un Ecobarrio?
En multitud de ocasiones, el ruido, la contaminación, la degradación de los espacios próximos a los núcleos habitados, los excesos urbanísticos, el abandono de los centros urbanos y la sobreexplotación de los recursos naturales han transformado negativamente la imagen de nuestros pueblos y ciudades hasta el punto de convertirlos en lugares paulatinamente menos aptos para la convivencia, el trabajo, la integración social y el descanso.
Esta circunstancia, unida a la propia evolución de los usos y necesidades humanas, para las que cada vez ofrecen menos soluciones las ciudades del siglo XX, hace imprescindible la formulación de nuevos modelos urbanísticos y arquitectónicos que devuelvan a las ciudades su función original de catalizadoras sociales y comerciales.
El Ecobarrio como solución
La respuesta se encuentra en lo que hemos venido a denominar “Ecobarrio”, es decir, un espacio urbano más respetuoso con el Medio Ambiente y más apto para el disfrute y el esparcimiento de los ciudadanos. Este espacio, a imitación del ágora griega o del foro romano, está diseñado para convertirse en punto de encuentro de los ciudadanos, dotándoles de amplias zonas peatonales, jardines y áreas recreativas y liberándoles de las incomodidades del tráfico moderno.
Se propone, para ello, un diseño geométrico de calles pavimentadas pero no asfaltadas, preparadas para el tránsito de vehículos no contaminantes, como bicicletas, y sólo, excepcionalmente, para la circulación en coche de los residentes y del reparto de mercancías. Las áreas de paseo y descanso incluyen, además, mobiliario urbano como farolas, aparcabicis, bancos y árboles autóctonos, de bajo mantenimiento, que refuerzan el carácter peatonal de la nueva ciudad.
Como contrapartida, las superficies de aparcamiento y los sistemas de acceso se ubican en el perímetro del “Ecobarrio”.
Asimismo, se pretende crear microclimas que permitan disfrutar del sol en invierno y de la sombra en verano, mediante una disposición inteligente de los volúmenes y de los elementos urbanos y gracias, también, a un avanzado sistema de pérgolas con refrigeración interna, con un circuito cerrado de agua, que rebaja hasta en 12 grados la temperatura de la calle durante el periodo estival.
La construcción de edificios bioclimáticos, es decir con diseños arquitectónicos, técnicas constructivas y materiales especiales que los hacen más respetuosos con el Medio Ambiente, intensifica la reducción del consumo energético provocado por aparatos de ventilación y calefacción.
En el “Ecobarrio” se entremezclan armoniosamente las más novedosas tendencias arquitectónicas con el desarrollo económico, el disfrute de la naturaleza y, en definitiva, la comodidad de los ciudadanos.
¿Qué criterios marcan el diseño del Ecobarrio?
Para conseguir un uso más eficiente de los recursos, una mayor calidad de vida y un mejor equilibrio en el ecosistema, se han tenido en cuenta criterios de sostenibilidad desde el punto de vista social, ecológico y constructivo.
CRITERIOS SOCIALES
Prioridad del peatón sobre el vehículo
- Se minimiza el uso de vehículos, con el consiguiente ahorro energético, la moderación de la contaminación y los efectos beneficiosos para la salud y la calidad de vida de las personas.
- Todos los servicios urbanos se concentran en un anillo perimetral al que cada edificio acometerá en un único punto. También los vehículos rodados se mantienen en el perímetro, donde se sitúan los accesos a los garajes subterráneos y el aparcamiento en superficie.
- El acceso de vehículos en el interior queda restringido a residentes, vehículos de transporte y emergencias.
Disfrute de espacios libres
- Se diseñan cuidadosamente los espacios libres para potenciar su disfrute y crear verdaderos lugares de convivencia, con sencillos métodos de control climático para crear microclimas agradables en todos los momentos del año.
Mejor aprovechamiento del suelo
- Se minimiza el consumo de suelo natural, reduciendo la ocupación y asegurando que el suelo libre no es consumido por el asfalto. Además, se reconstruyen suelos naturales, incluso sobre los propios edificios, utilizando cubiertas ecológicas.
Viviendas adaptadas a nuevas formas de vida
Según los datos del Instituto Nacional de Estadística, más del 56% de los hogares españoles no son familias nucleares jerarquizadas, sino que se organizan en situaciones muy distintas, entre las que destaca un 20% de hogares unipersonales.
- El espacio interior de las viviendas está pensado para permitir a los inquilinos que decidan como organizar su futuro hogar y para facilitar que, a medida que la composición familiar evolucione con el tiempo, sea sencillo y económico realizar las reformas necesarias para que el hogar evolucione junto a sus habitantes.
CRITERIOS ECOLOGICOS
Cubierta vegetal
- Consiste en incluir en la cubierta del edificio un estrato de tierra vegetal con las características adecuadas para que se pueda desarrollar, sin mantenimiento, una vegetación que, en principio, se escoge entre las plantas espontáneas de la zona. Equilibra las condiciones de temperatura y humedad, tanto en verano como en invierno.
Suelos filtrantes
- Medidas para mantener un entorno saludable para los habitantes incorporando el ecosistema urbano a los ciclos y procesos de la biosfera: suelos filtrantes, urbanizar respetando suelos fértiles, introducir especies vegetales de mantenimiento mínimo, permitir que se desarrollen microfaunas y microfloras, etc.
Vegetación autóctona
- Incorporar la vegetación al diseño del espacio público y privado para crear microclimas. Si incluyen especies con bajo consumo hídrico y resistencia a las condiciones climáticas del lugar con mantenimiento mínimo.
Pérgolas térmicas
- El “árbol instantáneo” es una especie de pérgola equipada con conductos que hacen circular agua refrigerada naturalmente bajo tierra.
- Este sistema de intercambio de calor con el subsuelo mitiga el calor estival hasta en 15º y aumenta la temperatura en invierno. Se pueden integrar en el mobiliario urbano o en el diseño de la edificación, contribuyendo a la creación de microclimas.
CRITERIOS CONSTRUCTIVOS
Autosuficiencia energética
- La arquitectura bioclimática con edificios autosuficientes energéticamente es una prioridad en el diseño del Ecobarrio.
- Una orientación norte-sur adecuada y viviendas integradas en su medio ambiente favorecerán la reducción del consumo energético.
Materiales de “baja energía”
- La obtención y elaboración de materiales de construcción se debe realizar en condiciones controladas, evitando el expolio de los recursos, la destrucción del medio y la contaminación.
- Los materiales utilizados son simples, económicos y eficaces, utilizando productos estándar de forma imaginativa. Aprovechamos las cualidades plásticas de los tubos de hormigón centrifugado, o la ligereza (y economía) de las estructuras de producción industrial.
- Lo vegetal se considera material de construcción y se cuida también la potencialidad de su crecimiento en el tiempo.
Ecoetiquetas
- Sellos de calidad otorgados por organismos internacionales, que garantizan la procedencia y características de los materiales: maderas procedentes de explotaciones controladas, materiales de baja toxicidad, productos biodegradables o reciclables, etc.
El diseño arquitectonico: los volúmenes
Los edificios siguen tres de los cinco “volúmenes” planteados en la propuesta de concurso: volumen banda, volumen carcasa y volumen gran superficie.
- El volumen banda es una estructura lineal que permite decidir el tamaño y la configuración adecuada para cada habitante, manteniendo la necesaria flexibilidad para, en el futuro, adaptarse a los cambios en la composición del núcleo habitativo, sus condiciones de trabajo u otras necesidades de los habitantes. Su textura exterior es vegetal.
- El volumen carcasa proporciona un espacio flexible en altura, con entreplantas posibles de distintas dimensiones en función de los parámetros que regulan la vivienda protegida. Su textura exterior es de madera.
- El volumen gran superficie proporciona espacio flexible para usos comerciales y otros usos compatibles a integrar en el tejido residencial. Su textura exterior es metálica.
Los usos compatibles, cuidadosamente regulados en función de la altura de planta, permiten la necesaria mezcla de vida, trabajo, ocio y servicios.
Los tres volúmenes se combinan en la “sección potencial”, que permite tomar decisiones en función de parámetros de densidad, soleamiento, control de sombras y microclimas, equilibrio de espacios públicos y privados, y, en definitiva la creación de un tejido social y urbano.
El diseño urbanístico
La altura de la edificación, que oscila entre 4 y 8 plantas, es coherente con el entorno, liberando espacio para un tapiz variado de superficies filtrantes que trasladan al espacio público la idea de flexibilidad, polivalencia, economía y sostenibilidad, a través de un diseño sencillo pero cuidadoso.
La intervención tiene el mismo presupuesto por m2 que los desarrollos de la zona, aunque estos dedican la mayor parte de la superficie libre a asfalto, con un fuerte desplazamiento que minimiza las partidas de firmes, maximizando las partidas de especies vegetales de mantenimiento mínimo. Para permitir la complejidad de uso, con soluciones sencillas y económicas, todos los servicios urbanos se concentran en un anillo perimetral, al que cada edificio acometerá en un único punto.
También los vehículos rodados se mantienen en el perímetro, donde se sitúan los accesos a los garajes subterráneos y el aparcamiento en superficie. Existen también unos pasos para vehículos que permiten acceder a puntos clave en el interior de la zona, pero dentro de un concepto de superficie de convivencia, en que el vehículo percibe su condición de invasor y la preferencia del peatón. Unos recorridos peatonales específicos enlazan con el sistema de espacios verdes y peatonales del resto del polígono.
Las cifras del Ecobarrio de Toledo
Superficies según usos:
- Residencial: 29.560 m2
- Dotacional: 8.805 m2
- Espacios “convivencia”: 20.972 m2
- Zonas Verdes: 3.331 m2
- Superficie peatonal: 5.172 m2
- Superficie tráfico rodado: 11.172 m2
- Inversión pública: superior a los 55 millones de euros.
- Plazo previsto: año 2008
- Viviendas previstas: 627 bioclimáticas (todas protegidas)
Conclusión
El Ecobarrio de Toledo es otro novedoso ejemplo de construcción sostenible donde se persigue, ya desde el origen de la idea del proyecto, un objetivo claro, conseguir una ciudad más habitable y donde los ciudadanos puedan poner en práctica el respecto al medio ambiente en su día a día.
Esperemos que este nuevo desarrollo culmine con éxito y ayude, junto con otras experiencias, a sentar las bases del desarrollo de los nuevos barrios de las ciudades españolas.