La nueva Ordenanza Solar Térmica (OST) de Barcelona entra mañana en vigor. La normativa, implantada a la ciudad desde 2000, ha sido modificada con el fin de hacerla extensiva a todos los edificios de nueva construcción o que se sometan a rehabilitaciones integrales.
La principal modificación que se ha aplicado a la nueva OST ha sido la redefinición del umbral de afectación (anteriormente establecido en 292 MJ/día), adecuándolo a la realidad actual. Al nuevo texto se han incorporado también modificaciones técnicas relevantes, como la exigencia de contratar un mantenimiento por un periodo mínimo de dos años, así como de requerir un certificado que permita controlar la correcta ejecución de la instalación y de sus prestaciones posteriores.
Gracias a esta modificación, la superficie de energía solar térmica tramitada llegará a los 200.000 m² en 2010, según las previsiones de la Agencia de la Energía de Barcelona. Si estas previsiones se cumplen, se doblarán las expectativas del Plan de Mejora Energética de Barcelona, que prevé unos 96.300 m² de captación solar térmica para 2010.
Durante el proceso de elaboración de este nuevo texto, se ha contado con la implicación y el consenso de los principales agentes implicados, tanto a través de los miembros de la Mesa por la Energía Solar como en el seno del Grupo de Energía del Consejo Municipal de Medio ambiente y Sostenibilidad. El Ayuntamiento de Barcelona fue la primera administración europea que impulsó y aprobar una ordenanza de captación solar térmica. Su aplicación ha aportado a la ciudad una reducción importante del uso de energía de origen fósil. Gracias a esta normativa, la ciudad de Barcelona ha reducido las emisiones de CO2 en 4.368 toneladas anuales. Haría falta un año para que 6,55 km² de bosque mediterráneo convirtieran en oxígeno esta cantidad.