La organización Greenpeace, presente la 12ª Conferencia de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático y la 2ª Reunión de las Partes del Protocolo de Kioto en Nairobi (Kenia), presiona a las delegaciones de los Gobiernos para que el Protocolo de Kioto sea una herramienta eficaz de lucha contra el cambio climático. Greenpeace hace una llamada de atención a los Gobiernos que asisten a la cumbre para que hagan frente a la realidad e intervengan urgentemente para evitar un cambio peligroso del clima.
«Los impactos peores del cambio climático se pueden prevenir, pero solamente si los Gobiernos actúan inmediatamente» ha declarado Sara Pizzinato, responsable de la campaña de Cambio Climático de Greenpeace en España. “Las generaciones futuras no nos perdonarán si nos retrasamos».
Se espera que esta Conferencia, la primera que se desarrolla en África subsahariana, se centre especialmente en las medidas de adaptación de todos los países ante el calentamiento global, y en la necesidad de ayudas económicas a los países más pobres, que ya están siendo afectados gravemente por este cambio.
En ningún lugar del mundo, este fenómeno es tan evidente como en el continente africano, y la delegación de la juventud de Greenpeace, la Solar Generation, destacará los impactos del cambio climático en África durante la Cumbre con una extensa agenda de actividades.
«Las obligaciones legales, morales, y políticas de los países ricos están claras: deben reducir dramáticamente sus emisiones y al mismo tiempo tienen que estar preparados para proporcionar una ayuda masiva a los países más pobres para su adaptación al cambio climático en el cual ya estamos inmersos» dijo Pizzinato.
Los países en vías de desarrollo son los primeros en sufrir los peores impactos, por ello, Greenpeace presenta hoy, en Nairobi, su informe y documental, «Cambios de Clima, Cambios de Vidas», con testimonios de víctimas del cambio climático de todo Brasil.
El informe y el documental también exploran la relación entre la destrucción de la foresta pluvial más grande del mundo – la Amazonia- y el cambio climático, siendo Brasil el cuarto emisor más grande de CO2 del mundo a causa de la deforestación.
«Brasil necesita tomar responsabilidades concretas ya que es uno de los emisores más grandes de CO2 del mundo. El Gobierno brasileño debe combatir la tala de árboles, promover las energías limpias y renovables y la eficiencia energética. Los ciudadanos brasileños tienen derecho a saber cómo de vulnerables estamos frente al cambio climático y lo que hará nuestro Gobierno para reducir nuestra contribución a este problema» ha declarado Carlos Rittl, responsable de la campaña de Energía y Cambio Climático de Greenpeace en Brasil.
«Los 163 gobiernos que han firmado el Protocolo de Kyoto deben poner de lado sus intereses a corto plazo para garantizar la lucha global y a largo plazo contra el cambio climático», dijo Pizzinato.