El cambio tecnológico experimentado, en los últimos años, en las pantallas de los ordenadores y televisores puede originar una acumulación de materiales tóxicos en los ecoparques de la provincia de Valencia, donde se están depositando los tubos catódicos existentes en los aparatos convencionales, o se puede fabricar con ellos nuevos materiales de construcción, como hormigón de alta calidad o mármol sintético, más resistente y ligero, reincorporando al ciclo productivo materiales como el vidrio.
Esta es la base de la puesta en marcha del proyecto europeo para el reciclaje de los tubos catódicos que ha elaborado la Diputación de Valencia, a través del área de Medio Ambiente, con el objetivo de gestionar eficazmente el citado residuo tóxico.
La iniciativa, enmarcada dentro del proyecto Perspective 2007-2013, cuenta con un presupuesto total de 51.967 euros, financiado en un 78%, (40.475,25 euros) por la Unión Europea, y tiene una duración de 13 meses.
Según el diputado delegado de Medio Ambiente en la Diputación de Valencia, Vicente Aleixandre: «Merced a este proyecto evitaremos que los tubos catódicos acaben en un vertedero y se pierda gran cantidad de materia prima. Además, también fomentamos el desarrollo sostenible y la mejora medioambiental de los pueblos de la provincia de Valencia, así como damos cumplimiento a la directiva europea 2002/96/CE sobre residuos de aparatos eléctricos y electrónicos».
Para llevar a cabo dicho proyecto, la Diputación ha creado un consorcio liderado por la Corporación Provincial y en el que participan el Instituto Tecnológico de la Construcción (AIDICO), asociación sin ánimo que tiene el objetivo de incrementar la capacidad de innovación y calidad de las empresas de la construcción, para potenciar su competitividad en mercados nacionales e internacionales; y la organización E-misszió, asociación húngara sin animo de lucro que trabaja con la idea de fomentar iniciativas para el desarrollo social, económico y ambiental en los municipios.
Aleixandre también ha querido recalcar: «Es la primera vez que la Diputación obtiene ayudas financieras del programa europeo Interreg IIIC Sur y con este nuevo proyecto se convertirá en la administración pionera en el tratamiento de este tipo de residuos electrónicos que tantos problemas ambientales está generando».
«En definitiva, pretendemos transformar un residuo en un recurso, mediante la elaboración de alternativas para el reciclaje del vidrio existente en los aparatos eléctricos», ha explicado el diputado delegado de Medio Ambiente.
Vicente Aleixandre concluyó señalando: «Dado que la Comunidad Valenciana va a dejar de percibir fondos europeos, los valencianos necesitamos trabajar en la búsqueda de nuevos proyectos, como este, para su financiación».