Unión Fenosa invertirá 200 millones de euros hasta 2008 en el programa de transformación de sus centrales de carbón para reducir las emisiones contaminantes de estas instalaciones. Este programa forma parte del llamado Plan Carbón Limpio de la compañía puesto en marcha a finales del pasado año.
El objetivo de este Plan es incorporar a corto plazo en las centrales térmicas de carbón tecnologías más eficientes de generación que reduzcan las emisiones de SO2, NOx y partículas. Para conseguir este objetivo, Unión Fenosa ha puesto en marcha proyectos de desulfuración y desnitrificación, así como la compra de carbón de importación de bajo contenido en azufre. Todo ello de acuerdo con la nueva Directiva de Grandes Instalaciones de Combustión de la Unión Europea (Directiva GIC) que entrará en vigor el 1 de enero de 2008.
En concreto, para reducir las emisiones de SO2, Unión Fenosa contará en 2008 con dos plantas de desulfuración, una en el grupo 2 de la central de La Robla (León) y otra en el grupo 3 de Narcea (Asturias). Estas plantas eliminarán el 95% del SO2 que emiten los gases.
La empresa también va a instalar nuevos quemadores en las calderas, así como mejorar el rendimiento de los sistemas (precipitadores electrostáticos) de reducción de partículas. Estas modificaciones disminuirán las emisiones de NOx y partículas en las centrales de la Robla 2, Narcea 3 y Meirama hasta el límite máximo que permiten estas tecnologías.
La emisión de CO2 en centrales térmicas se prevé resolver en el futuro con tecnologías de captura y secuestro, que están todavía por desarrollar. Con estos sistemas, se podría llegar a disminuir las emisiones de CO2 en un 90%.
Captura y secuestro de CO2
En el largo plazo, y conforme a las directrices de la Unión Europea, a partir de 2020 toda nueva central de carbón en Europa deberá llevar incorporado captura y secuestro de CO2 y las centrales existentes tendrán que estar preparadas para adaptarlo. Con este fin, Unión Fenosa participa en los proyectos de investigación españoles y europeos que conduzcan al desarrollo de tecnologías comerciales para la reducción de las emisiones de CO2 (captura y secuestro). Unión Fenosa lidera junto a Endesa un programa de investigación tecnológica promovido por el Ministerio de Industria llamado Cenit CO2 para desarrollar este tipo de tecnologías.
En el medio plazo, el Plan estratégico 2007-2011 de Unión Fenosa (Plan BIGGER) prevé disponer de emplazamientos para construir 1.200 MW de centrales térmicas de carbón de nueva tecnología, que reducirá también las emisiones de CO2 a la atmósfera como consecuencia de un mayor rendimiento (centrales supercríticas). Además, estas centrales se diseñarán para adaptar, cuando el estado de la tecnología lo permita, las instalaciones necesarias para la captura y secuestro del CO2 emitido.
Las centrales supercríticas de carbón pueden llegar a un rendimiento del 45% (frente al 36-38% del parque actual), y están ya en su fase de explotación comercial. Este tipo de instalaciones son las que se acercarían más a la eficiencia de las centrales de ciclo combinado (55%).
El siguiente paso serán las centrales Ultra Supercríticas, que teóricamente con presiones y temperaturas de vapor de 300 bar y 700ºC podrían llegar al 53% de eficiencia. No están de momento disponibles en el mercado aunque están en fase de estudio y estarán licenciadas para el año 2015 (Proyecto Thermie AD 700).