WWF/Adena felicita a AENA y al Ministerio de Fomento por la decisión de exigir madera con certificación forestal FSC (Consejo de Administración Forestal) en las obras de la nueva área terminal del Aeropuerto de Barcelona. Por vez primera este ministerio exigirá garantías del origen legal y sostenible de la madera.
Un mes después de la advertencia que hacía WWF/Adena a los ministerios de Fomento y Medio Ambiente sobre el riesgo de uso de madera de origen ilegal en las obras de la nueva terminal del aeropuerto de Barcelona, la organización de conservación recibe con gran satisfacción la decisión de la dirección de infraestructuras de AENA, organismo dependiente del Ministerio de Fomento, de exigir el sello FSC a los productos de madera prescritos como garantía de su origen legal y sostenible.
En palabras de Juan Carlos del Olmo , Secretario General de WWF/Adena “Este es un paso de gran trascendencia para que se deje de utilizar madera de origen ilegal con financiación pública. Esperamos que este tipo de medidas se extiendan a otras obras públicas y departamentos de este ministerio”.
La compra pública responsable de productos forestales es un mandato ya recogido en la Ley de Montes, para luchar contra las talas ilegales y la explotación insostenible de los bosques. En su articulado se da prioridad a los productos con certificación forestal como instrumento para cumplir esta normativa. Es precisamente la certificación forestal FSC el sistema más exigente y el único que cuenta con el respaldo de la mayoría de las ONG sociales y ambientales en todo el mundo.
Según del Olmo, “El consumo de madera en las obras públicas tiene una influencia enorme en los modelos de gestión de los bosques. Pero también, puede contribuir a fomentar su gestión responsable si se da prioridad al uso de madera con certificación FSC.”
Para WWF/Adena, la decisión del Ministerio de Fomento es una gran señal a favor del uso sostenible de los bosques. La organización mundial de conservación se felicita por haber llegado a tiempo para hacer que una acción de compra pública se convierta en una herramienta de conservación de bosques.
La organización recuerda que el 16% de la madera que se consume en España procede de países donde las talas ilegales son prácticas habituales y las Administraciones públicas acaparan directamente el 18% del consumo total de productos madera.