Juan Carlos de León, Gerente de EMVISESA, y Ramón Iglesias Pérez, Administrador Único de Sodinur Consultores, S.L. han firmado un acuerdo que supone la promoción de un proyecto de investigación de I+D+i con el doble objetivo de colaborar al ahorro energético global mejorando la calidad constructiva de las viviendas que promueve y de realizar una investigación tendente a mejorar la redacción de la normativa de obligado cumplimiento en esta materia.
La empresa Sodinur, miembro patrocinador de la Corporación Tecnológica de Andalucía (CTA), se ha unido a esta iniciativa que cuenta con la participación para la ejecución de tareas de investigación y desarrollo del grupo TEP-130, catalogado dentro del Plan Andaluz de Investigación (PAI) de la Universidad de Sevilla.
Los objetivos generales del proyecto son:
- Liderar el proceso de transformación de los sistemas constructivos aplicados a la ejecución de edificios para viviendas de protección oficial en Andalucía, para atraer desarrollos tecnológicos relacionados con el sector de la construcción.
- Construir edificaciones de mayor calidad mejorando el comportamiento energético de la envolvente y de los sistemas, así como incorporar energías renovables y reducir y racionalizar sus costes de mantenimiento mediante la aplicación de un desarrollo particularizado del conocimiento científico y tecnológico.
- Establecer una serie de criterios para los proyectos de instalaciones en los edificios de viviendas que consumen energías no renovables (principalmente fósiles) tendentes a la mejora de su eficiencia energética. Este deseable objetivo dista mucho de la realidad actual en nuestro país.
- Fomentar la colaboración entre empresas que desarrollen su actividad en sectores estratégicos para Andalucía con centros de investigación públicos para, optimizando los recursos, conseguir desarrollos más sostenibles.
- Contribuir al avance del conocimiento del problema del consumo energético de un sector productivo tan importante en nuestro país como es de la edificación. En una primera aproximación -que habría que ajustar en cada caso- podemos considerar que, del total de la energía que consumimos, un 25% corresponde al transporte, un 25% a la industria y un 50% a la edificación. Por consiguiente, la incidencia que ese sector tiene en la producción de CO2 y en el problema del calentamiento global es capital.