El primer ecobarrio de Madrid comienza su andadura. La Junta de Gobierno ha aprobado el proyecto de urbanización del Plan de Reforma Interior, PERI, de las colonias municipales San Francisco Javier y Nuestra Señora de los Ángeles, en el distrito de Puente de Vallecas. Dos colonias situadas en el mismo ámbito y construidas en la década de los 60 donde se alojaba un millar de familias y que, actualmente, presentan un alto nivel de deterioro y degradación. Con esta actuación se reordena la trama urbana y se construirán 2.069 viviendas, todas ellas de protección pública.
El Ayuntamiento de Madrid desarrolla de esta forma una estrategia basada en crear ciudad desde un punto de vista sostenible. El ámbito, de 8,29 hectáreas, está delimitado al norte por la calle de Javier de Miguel; al sur por la avenida de San Diego; al este por Higinio Rodríguez y, al oeste, por las calles de los Montes Pirineos y del Puerto de la Bonaigua. La calle de Martínez de la Riva lo atraviesa y divide en las dos colonias que dan nombre al proyecto.
Es la primera iniciativa en Europa donde se utilizará este sistema de pilas de combustible en una aplicación estacionaria para viviendas, aunque ya existen desde hace años experiencias similares realizadas con éxito en Estados Unidos y Japón. En España todos los proyectos realizados hasta ahora con este sistema han sido aplicados a edificios de uso terciario, industrial y al sector de la locomoción.
Un barrio sostenible
Mediante una inversión de 13.959.910 euros, se va a rediseñar la urbanización incluyendo todos los elementos de las redes de servicios públicos: mejora de la red viaria, alcantarillado, alumbrado, zonas ajardinadas y agua, así como las redes de compañías privadas de energía eléctrica, gas natural y telecomunicaciones.
El ecobarrio incorpora, por otra parte, las más avanzadas tecnologías para garantizar la sostenibilidad. Contará con un novedoso sistema no contaminante para el medio ambiente que abastecerá de energía a todos los edificios a partir del biogás obtenido de basuras urbanas. Para ello, se construirá bajo el suelo de la colonia una planta de producción termoeléctrica, basada en tecnologías de condensación, baja temperatura, energía solar térmica y pilas de combustible que se encargará de transformar el gas en calor y electricidad, y que abastecerá de energía al ecobarrio.
Desde esta central de producción se generará, por un lado, electricidad para exportar a la red general de distribución y, por otro, calor para la calefacción y el agua caliente sanitaria de las más de 2.000 viviendas que albergará el nuevo barrio. El rendimiento estacional anual del conjunto del sistema se estima en torno al 197%, una cifra muy superior al que proporciona una caldera convencional, situado en torno al 60%.
La contaminación medioambiental del sistema de cogeneración con pilas de combustible será nula y el grado de contaminación de la central térmica, dado su alto rendimiento, será 2,3 veces menor que cualquier sistema convencional de producción de calor por gas natural.
Finalmente, el ecobarrio estará dotado de una red de recogida neumática de residuos sólidos que permite eliminar los contenedores de la calle, ahorrando un 30% en los costes respecto al sistema de recogida tradicional. Este sistema consiste en un conjunto de tuberías de aire a presión por donde se transportan los residuos desde los edificios hasta el depósito de almacenamiento y transferencia. Aquí es donde acceden los camiones de recogida de basuras.
Más de 800 familias realojadas
Los realojos de la Colonia San Francisco Javier están ya prácticamente finalizados. Sólo queda pendiente una familia, aunque está previsto resolver el caso antes de que acabe el año. De esta colonia, se ha adjudicado vivienda a 437 familias que han sido realojadas, mayoritariamente, en tres promociones del mismo ámbito.
Respecto a la Colonia Nuestra Señora de los Ángeles se ha adjudicado vivienda ya a 371 familias, en su mayoría realojadas en el mismo distrito. El número de familias pendientes de realojo es de 272.