El 21 de junio se celebró en Madrid, el “Encuentro Visiones Arquitectónicas de Proyectos: Arquitectura e Ingeniería de la T4 Barajas- Diseño Bioclimático y Eficiencia Energética” organizado por el Grupo Habitat Futura. El encuentro fue inaugurado por Isabel León, presidenta de ASA, Asociación de Sostenibilidad y Arquitectura del Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España, por Antonio Lamela, Doctor Arquitecto y Celia Galera, Directora General del Grupo Habitat Futura.
En la inauguración se puso de manifiesto la necesidad de dar a conocer, profundizar y promover las acciones, propuestas y edificios, que como el caso de la Terminal 4 de Barajas, son un ejemplo de desarrollo sostenible, en el que han primado en su diseño los criterios de respeto al medio ambiente junto con un diseño atractivo, y la búsqueda del bienestar para sus usuarios, los pasajeros. En palabras de Antonio Lamela “es tan importante una forma y diseño atractivos como las soluciones constructivas que dan respuesta a las necesidades de sustentabilidad y respeto al hogar en que vivimos, nuestro planeta”
La estrategia medioambiental
En el encuentro se analizaron en profundidad las estrategias de diseño bioclimático y las medidas, tanto activas como pasivas, adoptadas en la Terminal, como por ejemplo:
- la orientación norte-sur y la configuración de la parcela: Para ello, se tomó la carta solar de Madrid, y se analizaron las diferentes radiaciones solares en función de la estación del año, en la que el los rayos del sol tienen un grado de inclinación diferente.
- Para conseguir una mayor iluminación natural, en detrimento del uso de la iluminación artificial, se optó por grandes oberturas de vidrio con doble acristalamiento, que permiten la entrada de la luz, y que al mismo tiempo, tienen un alto aislamiento térmico.
- Además, para evitar la radiación solar directa, y por tanto, el excesivo sobrecalentamiento, se incorporaron protecciones solares en los lados oeste y este.
- Con el mismo objetivo de conseguir una mayor iluminación natural, se hizo un especial diseño en las luminarias ubicadas en la cubierta.
- El en aparcamiento, incorpora una de las mayores cubiertas ajardinadas de Europa, con el objetivo de conseguir un alto aislamiento tanto del calor como del invierno. También en el aparcamiento, se ha procurado tener una correcta ventilación gracias a las oberturas que se han dispuesto.
Como medidas activas, se han aplicado, por ejemplo:
- un ingenioso sistema de refrigeración, que permite la mayor eficiencia energética posible y la disminución del consumo energético en sus instalaciones.
- La utilización de luminarias de bajo consumo energético. Destaca la utilización de espejos para optimizar la iluminación.
- También destaca la utilización de materiales respetuosos con el medio ambiente como por ejemplo: el bambú, que destaca por su rápida producción. Se ha utilizado troncos de bambú con una edad de 4 o 5 años.
El estudio Lamela es consciente de que la edificación es el principal consumidor energético, por lo que resulta necesario trabajar con el objetivo de reducir su consumo. Se debe fomentar y promover que el urbanismo y la arquitectura cumplan su condición de encontrar respuestas bioclimáticas, así como propiciar un bajo consumo energético en relación al uso de energías convencionales y agotables.
Según el responsable de medio ambiente del Estudio Lamela “Los beneficios de un edificio sostenible incluyen un rendimiento energético más eficiente, unas condiciones óptimas de bienestar para sus usuarios, la reducción de emisiones de CO2, la disminución del consumo energético, la disminución de la demanda energética y la contribución a un Desarrollo Sostenible. No tenemos que dejar de consumir, sino consumir mejor, teniendo como objetivos el ahorro energético, la eficiencia energética, las energías renovables.”
La Terminal 4 de Barajas constituye una de las mayores obras arquitectónicas edificadas con más de 1 millón de metros cuadrados construidos. En el encargo del proyecto se especificaba que el aeropuerto debía ser capaz de albergar unos 80.000 viajeros/diarios. Sus creadores trataron de dar respuesta tanto a los problemas medioambientales del entorno y humanos, así como la adecuación a su función, teniendo muy presente las consideraciones energéticas en cuanto a eficiencia energética y menor consumo de energía.
Para la redacción del proyecto de la Nueva Área Terminal se convocó un concurso internacional promovido por Aena. En octubre de 1997 se eligió la propuesta presentada por el equipo formado por cuatro empresas: el estudio de arquitectura español Estudio Lamela y el británico Richard Rogers Partnership, la ingeniería española Initec y la británica TPS. El proyecto ganador destacaba por su sencillez, su adaptabilidad, su robustez y su flexibilidad, admitiendo con naturalidad los cambios y futuras ampliaciones.
La terminal T4 del aeropuerto Madrid-Barajas ha sido galardona con múltiples premios, tanto internacionles, como el RIBA European Awards y el RIBA Stirling Prize otorgados por el Royal Institut of British Architects; como nacionales, así el Premio Fad. Todos ellos otorgados en el 2006.