Acciona Energía promueve tres plantas de biomasa para producción de electricidad en Castilla y León. Están proyectadas en Briviesca (Burgos), Valencia de Don Juan (León) y Almazán (Soria), con una potencia total de 55 MW y una inversión aproximada de 140 millones de euros. Todas ellas contarán con participación del Ente Regional de la Energía (EREN) de Castilla y León.
En conjunto, las nuevas instalaciones producirán 440 millones de kWh, equivalentes al consumo doméstico 180.000 hogares de Castilla y León y crearán más de trescientos puestos de trabajo, directos e inducidos, en las propias plantas y en el sector de aprovisionamiento de la materia prima. La planta de Briviesca podría estar en marcha en el segundo trimestre de 2009 y las dos restantes en el segundo semestre de 2010.
Acciona Energía cuenta ya con tres plantas de biomasa operativas en España que suman 33 MW. La más importante de ellas, de 25 MW, está ubicada en Sangüesa (Navarra). Empezó a funcionar en pruebas en 2002 y produce 200 millones de kilovatios hora al año mediante la combustión de 160.000 toneladas de paja. Esta experiencia de varios años en la operación y funcionamiento de de una planta de biomasa la trasladará la compañía a las instalaciones ahora proyectadas.
La planta de Briviesca tendrá 15 MW de potencia y producirá 120 millones de kilovatios hora mediante la combustión de 98.000 toneladas de materia prima (un 80% de residuos herbáceos –fundamentalmente paja- un 20% de residuos leñosos). Supone una inversión de 43 millones de euros y su construcción se iniciará a finales de 2007 o inicios de 2008.
La mayor parte de la materia prima provendrá de las provincias de Burgos y Palencia (en un radio de 75 kilómetros en torno a la planta), y en especial de la comarca de la Bureba, beneficiándose todas ellas de la puesta en valor de esta materia orgánica residual. Para ello se suscribirán contratos a largo plazo con agricultores, cooperativas y profesionales del sector. La planta generará 25 empleos directos y 75 indirectos.
Valencia de Don Juan: la mayor planta
La planta de Valencia de Don Juan (León) será la de mayor potencia (25 MW) de las tres proyectadas. Consumirá 160.000 toneladas de materia prima al año, con una distribución de la misma similar a la de Briviesca (80% residuos herbáceos, 20% residuos leñosos). Supone una inversión de 55 millones de euros y producirá 200 millones de kilovatios hora.
La mayor parte de la materia prima provendrá de las provincias de León, Palencia, Valladolid y Zamora en un radio de 100 kilómetros en torno a la planta. Por el este, el radio de aprovisionamiento de la materia prima alcanzará casi el correspondiente a la planta de Briviesca por el oeste, lo que hará que casi toda la zona norte de la Comunidad –Burgos, Palencia y León- sea potencial suministradora de la planta. La instalación creará entre 25 y 30 empleos directos y 100 indirectos.
Almazán: Diferentes materias primas
La planta de Almazán (Soria) se ha proyectado con 15 MW de potencia y tendrá una mayor variedad de materia prima para la combustión: residuos forestales y agrícolas por un lado y cultivos energéticos, por otro, en proporción que variará a tenor de las tendencias en el suministro y la evolución del negocio. La planta supone una inversión de 42 millones de euros, y producirá 120 millones de kilovatios hora al año.
Dada la diversidad de aprovisionamientos y el diferente poder calorífico de los mismos, se necesitarán 117.000 toneladas de materia prima al año, con un radio de aprovisionamiento en torno a la planta de 75 kilómetros, que comprende la totalidad de la provincia de Soria, y algo de la de Burgos. La planta creará 25 empleos directos y 70 indirectos.
Además de las citadas, ACCIONA Energía tiene otras tres plantas de biomasa en desarrollo en España, todas ellas de 15 MW de potencia. Los proyectos se ubican en las localidades de Miajadas (Cáceres), Alcázar de San Juan (Ciudad Real) y Cuenca.
Un sector que debe despegar
La biomasa para producción de electricidad ha sido, dentro de las tecnologías renovables, la que menos desarrollo ha experimentado en los últimos años en comparación con las expectativas previas. Si en 1998, la biomasa (incluyendo el biogas) contaba con 189 MW instalados en España, en 2004 –seis años después- sólo se habían alcanzado los 344 MW –una media de 25 MW anuales-, pese a que el objetivo del Plan de Fomento de Energías Renovables aprobado en 1999 era alcanzar los 1.897 MW en 2010 y el más reciente Plan de Energías Renovables (PER), aprobado en 2005, prevé llegar al final de la década a los 2.039 MW.
El hecho de que en 2005 y 2006 se hayan instalado sólo 65 MW en total, hasta alcanzar los 409 MW, ha llevado al Gobierno a aprobar un aumento de las primas a la generación eléctrica por biomasa, en el Real Decreto 661/2007, de 27 de mayo, que se cree posibilitará la materialización de nuevos proyectos.
Pese a su gran potencial en biomasa, Castilla y León tiene actualmente sólo 9 MW operativos para producción de electricidad en esta tecnología, situación que contrasta con su destacada en otras energías renovables, como la eólica y la hidráulica.