Iberdrola ha puesto en marcha un proyecto piloto para determinar las posibilidades del uso de biomasa para la co-combustión en centrales térmicas de carbón. Este proyecto se enmarca en un convenio de colaboración con el Ministerio de Medio Ambiente, la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Castilla y León y el Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE).
La Compañía realizará pruebas en el Grupo 2 de la planta de Velilla del Río Carrión (Palencia), que cuenta con una potencia instalada de 350 megavatios (MW) y consume, sobre todo, carbón nacional. La tecnología actual permite sustituir hasta un 10% de este combustible por biomasa, lo que ofrece un potencial de reducción de unas 200.000 toneladas de CO2 al año.
El Ministerio de Medio Ambiente elaborará un estudio para conocer la disponibilidad y coste de la biomasa en el entorno de las centrales eléctricas de carbón operativas en España. El objetivo último de este proyecto es culminar este estudio y determinar los costes reales de la utilización de biomasa para la co-combustión, para lo que se analizará todo el proceso de gestión de entre 3.000 y 7.000 toneladas de biomasa de origen forestal.
Este acuerdo complementa el proyecto de I+D+i denominado BIOVEL que Iberdrola está desarrollando en la central de Velilla, dentro del programa de innovación de la Junta de Castilla y León, que ha permitido identificar y caracterizar la biomasa existente en el entorno de la planta así como modelar su combustión en la caldera, originalmente diseñada para antracitas. El último paso de esta iniciativa es la realización de pruebas reales de co-combustión, que se realizarán en el marco del convenio recién firmado.
Todas estas iniciativas se encuadran en el conjunto de medidas de reducción del impacto ambiental que está impulsando Iberdrola en sus centrales térmicas. En concreto, en la de Velilla se está construyendo una desulfuradora que reducirá en un 95% las emisiones de óxidos de azufre y en un 80% las de partículas sólidas. También está en curso la instalación de nuevos quemadores que disminuirán en un 50% las emisiones de óxidos de nitrógeno.
Plan de Gestión de la Biodiversidad
Cabe destacar que Iberdrola prevé invertir 140 millones € entre 2007 y 2009 en el desarrollo del Plan de Gestión de la Biodiversidad del Negocio Liberalizado España. Este plan de acción tiene como objetivo prioritario reducir los riesgos ambientales de los nuevos proyectos de generación y los de explotación de las instalaciones existentes.
La Compañía centrará el esfuerzo inversor -122 millones €, el 87% del presupuesto- en desarrollar iniciativas para reducir las emisiones de las centrales eléctricas, un objetivo que está en línea con los planteamientos del Plan Estratégico 2008-2010 de Iberdrola y con el cumplimiento de las metas del Protocolo de Kioto.
Además de la mencionada directriz, la política sobre la gestión de la biodiversidad del Negocio Liberalizado de la Empresa en España pretende hacer compatibles las plantas de producción con su entorno, mediante la reducción del consumo de recursos naturales y el uso de los más respetuosos con el medio ambiente.
Los principios básicos de actuación recogidos en este plan de acción de Iberdrola son integrar la conservación de la diversidad ecológica en los nuevos proyectos, promover la formación del personal en materia de biodiversidad, prever los impactos de las nuevas instalaciones, minimizar los riegos ambientales en la operación y el mantenimiento y promocionar iniciativas de I+D+i (Investigación, Desarrollo e Innovación) y de sensibilización.
El Plan de Gestión de la Biodiversidad se aplica a todas las áreas del negocio de generación de Iberdrola (térmica, hidráulica, nuclear y cogeneración), así como a las tareas de operación y mantenimiento y a la actividad comercial y de promoción de negocio.