La Consejería de Medio Ambiente y Desarrollo Rural ha empezado ya a diseñar la Estrategia Regional de Biomasa Forestal, que marcará la política regional sobre el medio natural y proporcionará iniciativas para la valorización de la biomasa forestal y su aprovechamiento sostenible. Según los plazos marcados por la Dirección General de Política Forestal, que dirige Cristino Ruano, el documento estará redactado después del verano, en torno al mes de septiembre, y posteriormente arrancará un complejo proceso administrativo para poder tener aprobada la citada Estrategia en 2009.
La iniciativa regional se enmarca dentro de una ambiciosa Estrategia Nacional para implantar un modelo energético sostenible basado en el ahorro, la eficiencia y la diversificación de fuentes, en la que el desarrollo de la biomasa forestal residual cumplirá un papel determinante. Para ello, se definirán las medidas, acciones y los instrumentos necesarios para la utilización y valorización energética de la biomasa forestal residual procedente de aprovechamientos forestales.
La Estrategia persigue varios objetivos, entre los que destacan la mejora de las condiciones de vida de las zonas rurales y el fomento de nuevos yacimientos de empleo ligados al medio rural; la mejora de las condiciones de los montes frente al riesgo de incendios al disminuir la carga de combustibles, madera y leñas muertas sobre el suelo; y la contribución al cumplimiento de los compromisos de España en la Unión Europea y el protocolo de Kioto, con la reducción de las emisiones de CO2 a la atmósfera.
La Consejería asturiana de Medio Ambiente y Desarrollo Rural tiene varias iniciativas en marcha para avanzar en el aprovechamiento de la biomasa forestal. Además de la redacción y aplicación de esta estrategia a corto plazo, la Dirección General de Política Forestal ha empezado ya a negociar con Andalucía posibles vías de colaboración en proyectos de biomasa a través de la empresa pública andaluza EGMASA, cuyos máximos responsables estuvieron de visita en Asturias. Según explicó el director general de Política Forestal, las conversaciones comenzaron precisamente en esta visita, en la que los andaluces comprobaron “in situ” en Taramundi y Somiedo los principales proyectos de gestión forestal y de desarrollo rural de estas zonas de Asturias. El Principado quiere aprovechar estos contactos para el desarrollo de proyectos con Andalucía por su experiencia en el sector de la biomasa forestal desde la década de los ’90.
“Hemos tomado la iniciativa desde Asturias para abordar el intercambio de conocimientos. Encaja en las previsiones de la Consejería y en nuestro compromiso de elaborar en esta legislatura una Estrategia Regional de Biomasa Forestal para definir los objetivos y medidas para el desarrollo de este aprovechamiento. Va a suponer una economía añadida a la que ya genera el monte y que debemos repercutir en nuevos proyectos para el medio rural”, señaló Ruano. “Andalucía tiene una situación muy distinta a la nuestra en cuanto a estructura de la propiedad y el sector productivo, pero puede aportarnos muchas cosas por su amplia experiencia desde mediados de los ’90 en el aprovechamiento de la biomasa forestal”, concluyó el Director General.