Cisco y el Ayuntamiento de Madrid, unidos en su compromiso por llevar a cabo iniciativas de sostenibilidad, han anunciado una colaboración por la cual desarrollarán en la capital el programa Connected Urban Development (CUD).
La visión del programa CUD de Cisco se basa en la aplicación de tecnologías innovadoras que permitan a las ciudades, mediante acciones sobre el diseño urbano y la gestión de la ciudad, mejorar el uso de la energía, reducir las emisiones de dióxido de carbono de los vehículos y cambiar la forma de trabajo e interacción de los ciudadanos. El compromiso del Ayuntamiento de Madrid, a través de la Oficina del Centro, se concreta en la promoción de la utilización de nuevas tecnologías en los edificios en proceso de rehabilitación. La finalidad del proyecto es convertir las viviendas, hasta ahora consumidoras ineficaces de energía, en centros capaces de administrar los recursos energéticos de una forma inteligente e incluso de generarlos mediante sistemas ambientalmente limpios.
Convertir el centro en un lugar más amigable, limpio y respetuoso con el medio ambiente se ha convertido en uno de los principales objetivos de la acción política del Gobierno de la ciudad, tal y como recoge el “Proyecto Estratégico para el Área Central”, que además impulsará el desarrollo social y económico de la zona.
La iniciativa Connected Urban Development se inició en septiembre de 2006 como parte del compromiso de Cisco con la Fundación William J. Clinton. Madrid se suma así a un proyecto del que ya forman parte otras ciudades estratégicas como Ámsterdam, San Francisco, Seúl, Birmingham, Hamburgo y Lisboa.
Madrid, a la cabeza de Europa
Con más de tres millones de habitantes, Madrid es la segunda ciudad más poblada de la Unión Europea. La posición estratégica de la capital de España y las fuertes inversiones realizadas en los últimos años han convertido a Madrid en el motor económico del país, con tasas de crecimiento superiores a la media de las grandes ciudades europeas. Los servicios y la construcción son los sectores productivos más importantes de la ciudad y la moderna red de transportes es una referencia de innovación en toda Europa: el aeropuerto de Barajas es el cuarto en tráfico de toda la Unión y el metro, con 319 kilómetros, es uno de los más extensos del mundo.
El fuerte crecimiento económico y demográfico experimentado en los últimos años ha llevado a las administraciones públicas a desarrollar políticas de sostenibilidad que mejoren la ciudad. Una de las pruebas más importantes de ello es el soterramiento de la M-30, que sólo en el último año ha liberado de la emisión al medio ambiente de más de 35.000 toneladas de dióxido de carbono, ha mejorado el tráfico, ha reducido los accidentes y ha convertido al peatón en el protagonista de la ciudad. Gracias al espacio recuperado en superficie, la ciudad de Madrid plantará más de 26.000 árboles donde antes había asfalto, un dato que subraya su posición como segunda ciudad del mundo con mayor número de árboles alineados.
Por otro lado, el Ayuntamiento de la ciudad ha conseguido unos resultados extraordinarios mediante el reciclado del 100% de las aguas residuales (unos 500 millones de metros cúbicos) y el 50% de los deshechos orgánicos. Además, la ciudad construirá el centro de biogás más grande de Europa.
“Mejores prácticas” de tecnología sostenible
La lucha contra el cambio climático es una materia que preocupa a las zonas urbanas cada vez más, ya que, según Naciones Unidas, las 20 ciudades más grandes del mundo, con una población superior a 10 millones de habitantes, son responsables del 75% de la energía consumida en todo el planeta.
“Desde Cisco estamos tratando de resolver los grandes problemas ambientales a los que se enfrentan las zonas urbanas a través de soluciones de tecnología de la información y las comunicaciones”, aclara José Manuel Petisco, Director General de Cisco España. “El compromiso de ciudades como Madrid, y el de la propia industria, permitirá dar un paso hacia adelante en medidas que favorezcan el desarrollo sostenible”.
Cisco ha puesto ya en marcha iniciativas como “Connected Bus”, para reducir el impacto ambiental del transporte público de San Francisco; “Personal Travel Assistant” en Seúl, que mejora de forma sostenible la experiencia de tránsito dentro de los entornos urbanos o los “Smart Work Centres” en Ámsterdam, que permiten contar con entornos inteligentes de trabajo fuera de las ciudades. De esta manera, los ciudadanos evitan tener que desplazarse al interior de ellas.