El Gobierno de la Ciudad de Madrid ha acordado establecer los valores de la temperatura que deben mantener los edificios administrativos, institucionales, instalaciones y locales donde se presten los servicios del Ayuntamiento de Madrid y de sus Organismos Públicos. Durante la estación de invierno no podrán superar los 22º C. y durante la estación de verano no podrá ser inferior a 24º C. Esta medida tiene como objetivo reducir el consumo energético manteniendo los niveles de confortabilidad, seguridad y salud de los trabajadores y usuarios.
Consciente de la creciente preocupación por el medio ambiente, el Ayuntamiento de Madrid promueve, desde hace años, actuaciones encaminadas a reducir las emisiones contaminantes a la atmósfera. Esta reducción pasa inevitablemente por la adopción de medidas para el fomento del ahorro y la eficiencia energética en la Ciudad de Madrid. Además, son las administraciones públicas las que deben realizar un mayor esfuerzo a la hora de reducir el consumo energético en sus edificios, no sólo por los beneficios ambientales que ello conlleva, sino también por su efecto ejemplarizante, como parte de la estrategia para conseguir que los ciudadanos se sensibilicen y realicen acciones tendentes al uso racional de la energía.
Los valores marcados por el Ayuntamiento de Madrid se establecen en virtud del Real Decreto 1027/2007, de 20 de julio, por el que se aprueba el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios, que establece para las condiciones interiores de diseño, en las estaciones de invierno y verano unos valores de temperatura relativa, comprendidos entre los 21º-23º C y 23º-25º C, respectivamente. Por otro lado, el Anexo III del Real Decreto 486/1997, de 14 de abril, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo, señala que la temperatura de los locales donde se realicen trabajos sedentarios, propios de oficina, estará comprendida entre 17º y 27º C, y la de los locales donde se realicen trabajos ligeros entre 14º y 25ºC .
Consumo energético
Asimismo, por acuerdo de la Junta de Gobierno, el Ayuntamiento de Madrid insta a todas las entidades públicas y privadas, así como a los particulares, para que adecuen la temperatura interior de sus edificios, instalaciones, locales y viviendas radicados en el ámbito territorial de la Ciudad de Madrid. Hay que tener en cuenta que en los hogares la climatización significa el 42% del consumo energético y que por cada grado que se sube la calefacción o se baja la refrigeración se incrementa el consumo de energía en un 7% y un 8% respectivamente.
El sector residencial, comercial e institucional es: el principal emisor de gases de efecto invernadero de la ciudad, aportando el 50% de las emisiones, seguido del transporte (36%); el primer consumidor de energía (50% del consumo) con el siguiente origen: gas natural 33,8%; derivados del petróleo 17,5%; electricidad 45,9% y carbón 2,5% y el primer consumidor de energía eléctrica (80% de la energía eléctrica facturada en Madrid).
En los últimos años se ha experimentado una notable reducción en el consumo de carbón y un crecimiento también importante en gas natural y electricidad (importada), a lo que ha contribuido significativamente el plan de subvenciones para la sustitución de calderas de carbón del Ayuntamiento de Madrid que, además, ha propiciado que las emisiones de gases de efecto invernadero de este sector se redujesen un 7% en el periodo 1990-2004.