Coincidiendo con el tercer aniversario de la declaración del incendio de Guadalajara que arrasó 13.000 Ha de bosque, la Fundación Apadrina un Árbol abrió a los medios de comunicación las puertas de las instalaciones de su Complejo de Educación Ambiental en Solanillos.
El objetivo de esta jornada fue mostrar el pleno rendimiento de todas las instalaciones, creadas por la Fundación con un doble objetivo. Por un lado, la concienciación medioambiental necesaria para la preservación y recuperación de nuestros bosques y, por otro, la implantación de una gestión sostenible del bosque que evite el abandono y contribuya a prevenir estas catástrofes humanas y ecológicas en el futuro.
El Centro de Educación Ambiental de la Fundación Apadrina un Árbol comenzó a funcionar en el mes de abril de 2008 habiendo recibido desde entonces más de 3.000 visitantes. El complejo contribuye, sin duda a la revitalización de la zona y a la generación de empleo, con 21 puestos de trabajo creados hasta la fecha.
Dentro de la filosofía del Proyecto de la Fundación Apadrina un Árbol, se recoge la sostenibilidad y la protección del Medioambiente. El ahorro energético, aumentando la eficiencia de las instalaciones, reduciendo el consumo y minimizando las pérdidas, y el uso de las energías renovables, que no contribuyen al cambio climático, son dos de los aspectos clave para lograr un desarrollo sostenible y la conservación del Medioambiente.
En base a este criterio, se ha desarrollado el Proyecto de Energías Renovables para las instalaciones térmicas de la Finca Solanillos. Para obtener el calor necesario para calefactar y proveer de agua caliente sanitaria a los diferentes edificios del complejo, se recurre a las dos fuentes de energía renovable que, dadas las características del entorno y del proyecto donde se encuadran las instalaciones, resultan más ventajosas energética y económicamente: la biomasa y el sol.
La biomasa utilizada procede de la limpieza y mantenimiento del monte, eliminando la maleza, y restos forestales que se encuentran en el suelo y talando o cortando algunos de los árboles, de modo que se potencie el desarrollo y crecimiento del bosque. Estas labores se realizan periódicamente, obteniéndose numerosos beneficios entre los que destacan la reducción del riesgo de que se produzcan incendios, dificultándose además su propagación en caso de producirse.
En base al alto potencial de generación de biomasa de la zona, y el bajo coste para su obtención, se opta por hacer de esta fuente de energía la base para el abastecimiento de calor al complejo de edificios del Centro de Educación Ambiental, instalándose dos calderas aptas para quemar los citados residuos forestales ambas con una potencia de 110 Kw.
El proceso necesario para lograr biomasa adecuada en tamaño y humedad para su uso como combustible resulta muy sencillo y supone un mínimo coste económico y energético. Tras la retirada de los residuos forestales descritos anteriormente, estos se trituran utilizando una máquina astilladora, que reduce la biomasa a astillas con un tamaño máximo de 5 cm. Estas astillas se acumulan, en espacios habilitados a tal fin, para su secado durante dos veranos, consiguiendo de este modo un combustible manipulable y con un poder calorífico adecuado para su combustión con un alto rendimiento. Posteriormente, las astillas se almacenan en dos silos que se comunican mediante un brazo giratorio aportando combustible a las calderas de biomasa situadas en una edificación específica.
La quema de biomasa, se complementa con el aprovechamiento de la energía solar con fines térmicos mediante el uso de captadores solares de alto rendimiento, de modo que en época estival abastezcan casi al cien por cien de agua caliente sanitaria a todo el complejo y lográndose de esta manera que se reduzca el consumo de biomasa y las horas de funcionamiento de las calderas, sirviendo como energía de apoyo durante el resto del año.
Para la instalación se ha optado por un sistema centralizado de generación de calor, tanto con la combustión de biomasa como por el aprovechamiento de la energía solar, utilizando en ambas instalaciones equipos de bajo consumo y alto rendimiento. Esta configuración favorece el ahorro energético y aumenta la eficiencia de la instalación, ya que se reducen los tiempos de respuesta ante demandas de calor o agua caliente sanitaria, en cualquiera de los edificios.
Desde el edificio que alberga las calderas, la instalación solar y los depósitos de agua caliente, se distribuye ésta a los diferentes puntos de consumo mediante tubería fabricada específicamente para distribución de líquido caliente (climatización invisible) que permite reducir al mínimo las pérdidas en el transporte y que se localiza bajo el solado de las diferentes edificaciones.
El control de la producción de calor (centralizado) y el del confort o consumo (localizado en cada edificio), se integran en un software que, mediante un ordenador, permite integrar el funcionamiento de ambas partes de la instalación, ajustando el consumo de energía a las demandas concretas de cada momento.
En lo referente a los sistemas de ahorro de agua, destacar el aprovechamiento del drenaje natural superficial del terreno en ladera que se filtra y se recoge en sumideros específicos. El agua es almacenada posteriormente en unos grandes depósitos acumuladores situados en la gran pradera del complejo. El agua acumulada en época de lluvias en estos depósitos servirá para el riego y mantenimiento de las zonas verdes del complejo.
Otros sistemas utilizados para el ahorro de agua son perlizadores en todos los grifos y termorreguladores en las duchas.
También dentro de las actividades realizadas en la finca se han desarrollado huertos en bancales que es el sistema tradicional de la zona donde se ha implantado un sistema de riego por goteo.
El objetivo principal con el que nace la Fundación Apadrina un Árbol es recuperar el bosque desaparecido con las llamas y luchar para evitar nuevos incendios en el futuro. Es precisamente por este motivo por el que el público infantil es uno de los prioritarios en los trabajos de la Fundación. Las labores de concienciación sobre la importancia que los árboles tienen en la vida de las personas y del planeta son especialmente fructíferas con los más jóvenes. Si desde su puesta en marcha parcial hasta hoy más de quinientas personas se han alojado en el Centro de Educación Ambiental, podemos afirmar que cerca de las tres cuartas partes de este número de pernoctaciones pertenecen al colectivo infantil.
Además del trabajo de concienciación de las generaciones del mañana, la Fundación Apadrina un Árbol está desarrollando una intensa agenda de actividades para divulgar activamente la necesidad de mantener los bosques como son la educación, la investigación y el ocio. Todas las actuaciones están dirigidas a favorecer y dinamizar, directa o indirectamente, la recuperación socioeconómica de la zona, generando nuevas vías de desarrollo.
El conjunto se complementa con un vivero forestal que se dedicará a la producción de planta para la reforestación de zonas sin regeneración natural y reposición de árboles.
También está planificado un Centro de fauna que tratará de acercar los animales de la zona a los más pequeños, así como un Centro de investigación (en colaboración con las universidades) donde se trabajará en parcelas de investigación destinadas al estudio de la evolución de la vegetación de la zona afectada por el fuego.
El complejo dispone ya de una Granja-escuela que es un espacio de educación ambiental, con especial interés en los niños, centro lúdico y de ocio.
Existe un Parque de ocio para toda la familia con instalaciones lúdicas basadas en actividades de aventura, con circuitos integrados en la naturaleza, como por ejemplo tirolinas, puentes tibetanos, rappel, escalada, etc., además de las tradicionales piscinas, pistas deportivas y zonas de recreo.
Desde el Centro se planifican rutas y visitas guiadas potenciando los senderos tradicionales e impulsando la comunicación con poblaciones cercanas y lugares de interés.
Las instalaciones, una vez rehabilitadas, ofrecen la siguiente distribución:
- Pabellones 1 y 2
- Alojamiento para 60 personas
- Talleres sobre ecología, mimbre, trabajos con piñas, etc.
- Salas de ocio con medios audiovisuales, juegos de mesa, etc.
- Zona de descanso y habitaciones
- Zona de museos
- Oficina administrativa
- Oficina de exposición y venta
- Zona de comedores:
- Cocina
- Cafetería
- Salón-comedor
- Iglesia:
- Salón de actos
- Sala de usos múltiples
- Zona de museos y exposiciones
- Casa Residencia:
- Vivienda para el alojamiento del personal
Conclusión
El proyecto y las instalaciones de la Fundación Apadrina un Árbol sientan las bases de una nueva gestión del bosque de la zona. A corto plazo, se establecen como prioritarios la recuperación ambiental y la creación de alternativas económicas. A medio y largo, la sostenibilidad como máxima, minimizando el impacto sobre la zona, el consumo de recursos naturales y garantizando la permanencia.
Buscando reducir lo más posible toda la huella medioambiental del Centro de Educación de la Fundación Apadrina un Árbol, se han estudiado, para su construcción, las mejores alternativas y aquellas que aprovechan los recursos que nos da el bosque. Calderas de biomasa, construcciones en madera, paneles solares… todo ha sido desarrollado persiguiendo la máxima armonización con el entorno.