Barceló Hotels & Resorts ha querido dar un paso más en su política de gestión sostenible y medioambiental y ha llegado a un acuerdo con la empresa sevillana MP Biomasa para implantar un sistema térmico de biomasa, que utiliza como combustible el hueso de aceituna, en el exclusivo hotel Barceló La Bobadilla (Loja, Granada).
La construcción de este singular proyecto, que ya ha sido instalado por MP Biomasa con éxito en una residencia de enfermos Alzeimer de Jaén, supondrá una inversión de 261.000 euros y permitirá una reducción en un 80% de las emisiones anuales de CO2 a la atmósfera por parte del hotel, que se encuentra magníficamente ubicado en un entorno natural privilegiado integrado por una frondosa finca de 350 hectáreas.
Este sistema, basado en la utilización de avanzadas tecnologías, y que operará de manera automatizada y telegestionada desde un puesto central, cubrirá las necesidades energéticas del Barceló La Bobadilla en materia de calefacción y agua caliente. A pesar de esa inversión, inicial, y gracias a las subvenciones recibidas por parte de la Agencia Andaluza de la Energía que promueve la utilización de energías renovables y, concretamente, los proyectos que utilizan la biomasa como combustible, y que cubren el 51% de los gastos, quedará amortizado en tan sólo tres años.
Además, en un plazo de diez años se podrá ahorrar hasta 500.000 euros respecto al sistema utilizado hasta ahora por el hotel que usaba como combustible el propano. El diseño de este proyecto ha sido desarrollado por MP Biomasa en colaboración con el Departamento de Mantenimiento de Barceló Hotels & Resorts.
La entrada en funcionamiento del nuevo sistema térmico de biomasa, que implicará la instalación de un silo de almacenamiento de biomasa y de dos calderas de 400 kW y 300 kW de potencia, y que coexistirá con el sistema actual, tendrá lugar el próximo invierno.
Ésta es la segunda vez que Barceló Hotels & Resorts y MP Biomasa colaboran en el desarrollo de un proyecto sostenible. La primera tuvo lugar en el hotel Barceló Aranjuez (Madrid) al instalarse en él una planta depuradora de aguas urbanas que funciona con el agua residual suministrada por el establecimiento, quien, a su vez, reutiliza el agua regenerada para regar las zonas verdes de sus alrededores.