La planta de energía solar fotovoltaica instalada sobre las cubiertas del recinto de Gran Via de Fira de Barcelona ha entrado en funcionamiento. El consejero de economía y finanzas, Antoni Castells; el presidente de Fira de Barcelona y de Fira 2000, Josep Lluís Bonet; el director general de Fira de Barcelona, Agustín Cordón, y el director general de Fira 2000, Francesc Solà, visitaron el nuevo parque fotovoltaico, uno de los mayores de España y del mundo ubicados sobre cubiertas de edificios.
La instalación fotovoltaica del recinto ferial de Gran Via ocupa los 135.000 m2 de cubiertas de los seis pabellones construidos actualmente. Con una potencia de 3,36 MW, aporta en la red general 4,4 GWh anuales de electricidad, equivalentes al consumo energético de 980 viviendas de cuatro personas, y evita la emisión anual de 2.047 toneladas de CO2 a la atmósfera. En una segunda fase la planta se ampliará en 30.000 m2 de cubiertas, una vez acaben los trabajos de construcción de los pabellones 5 y 7, con una potencia adicional de 1,2 MW.
La instalación ha supuesto una inversión de 17,7 millones de euros, con un ahorro de 2,1 millones de euros sobre el presupuesto inicial. El Institut Català d´Energia (ICAEN) ha participado en la concepción y definición del proyecto, que financia y coordina Fira 2000.
El nuevo parque fotovoltaico es un símbolo del camino que sigue Cataluña en el terreno de la energía y de la apuesta decidida por las energías renovables. Cataluña quiere liderar el cambio del modelo energético fomentando el ahorro y la eficiencia energética, impulsando la investigación en el ámbito de las energías renovables y garantizando la seguridad y la calidad del suministro mediante la construcción de las infraestructuras necesarias.
La implantación de plantas solares sobre cubiertas de edificios es una prioridad para el Gobierno ya que son respetuosas hacia el entorno y, a la vez, rentabilizan el espacio libre de los tejados para generar energía. Por este motivo, la Generalitat está promoviendo su desarrollo en edificios públicos, a través del contacto con las diferentes administraciones, y también a empresas privadas. Precisamente, una de las medidas del Acuerdo Estratégico para la Internacionalización, la calidad de la ocupación y la competitividad de la economía catalana, renovado el pasado mes de julio, es el fomento de las placas fotovoltaicas en cubiertas de naves industriales y también de edificios públicos.