Las compañías europeas tendrán que probar que la madera con la que están comerciando en Europa ha sido extraída y procesada de forma legal, según lo que se ha votado en la Comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo. WWF considera que este es un hito en la lucha contra la destrucción forestal a escala mundial y que supondrá una mejora muy necesaria en la nueva normativa sobre el comercio de madera propuesta por la Comisión Europea.
“Si se aplica correctamente, la ley tiene potencial para reducir de forma drástica el comercio de madera de origen ilegal en los países tropicales, ralentizar la deforestación y mantener los derechos de los pueblos indígenas. Los cambios introducidos hoy dan indicaciones más claras sobre lo que todos los actores que participan en la cadena de suministro deben hacer para probar la legalidad del producto. De igual forma, ofrecerá información certera sobre las consecuencias de las talas ilegales a quienes desobedecen las reglas”, apunta Félix Romero, Responsable del Programa de bosques de WWF España. Y continúa: “Muchas empresas en Europa ya han demostrado su deseo de garantizar que sólo los productos derivados de la madera extraída de forma legal tengan un lugar en el mercado. Ahora es crucial que el acuerdo que se ha tomado hoy pase el examen final del Parlamento Europeo y del Consejo”.
Las enmiendas propuestas también garantizan un refuerzo de la ley, al dar a las autoridades nacionales poder para investigar los incumplimientos y tomar medidas inmediatas para procesar a los infractores.
El debate sobre la necesidad de una legislación sobre el comercio de madera en Europa empezó hace más de cinco años y ha alcanzado ahora su fase crucial, ya que la UE está tomando decisiones fundamentales para liberar sus mercados de productos de madera extraída, procesada y vendida ilegalmente. Como uno de los mayores importadores de madera, la UE tiene la responsabilidad de poner fin a estas actividades.
WWF insta al Parlamento Europeo y al Consejo de Agricultura a apoyar las decisiones alcanzadas en febrero por la Comisión de Medio Ambiente cuando se vote la nueva ley el próximo 23 de abril y en junio respectivamente.