La muestra inaugurada en Armintza quiere dar a conocer la energía marina como una nueva fuente de abastecimiento energético que en este momento comienza a dar sus primeros pasos. Un estado incipiente pero que en País Vasco ya cuenta con proyectos pioneros en toda Europa como son la instalación de las olas de Mutriku y también la futura infraestructura ubicada en aguas de Lemoiz denominada bimep (Biscay Marine Energy Platform).
El Ente Vasco de la Energía – EVE ha puesto en marcha una exposición divulgativa en el Puerto de Armintza con el objetivo de dar a conocer la energía del mar y las posibilidades de su aprovechamiento energético. En este barrio del municipio de Lemoiz está proyectada la instalación del bimep, una infraestructura marina pionera en toda Europa para prueba y demostración de sistemas convertidores de olas, así como la construcción de un centro de investigación asociado.
La exposición pretende divulgar entre el público local el conocimiento sobre las posibilidades de aprovechamiento energético de la costa vasca así como los avances experimentados en el desarrollo de convertidores de olas en energía eléctrica. Para ello cuenta tanto con paneles y folletos divulgativos como con elementos audiovisuales preparados específicamente para este fin. La información incide en el proyecto del bimep, explicando los objetivos del mismo y el funcionamiento de una instalación que será un referente mundial en la investigación marina y que atraerá a investigadores de todo el mundo hasta esta localidad vizcaína. La muestra estará abierta al público desde julio hasta finales de septiembre, con un horario de 11:00 a 20:00 horas de lunes a domingo.
El bimep
La infraestructura del bimep será un campo de pruebas acotado en mar abierto con todos los elementos necesarios para poder “enchufar” los captadores de olas que están desarrollando diferentes empresas de todo el mundo. De esta forma podrán investigar su funcionamiento, fiabilidad, rendimiento y costes de operación. Un paso imprescindible para alcanzar la madurez comercial de estos dispositivos, pero que supone una elevada inversión añadida a los desembolsos económicos que ya realizan estas empresas tecnológicas para desarrollar sus convertidores de olas.
Y es que la inversión que supone para estas empresas desarrollar los captadores se ve ampliamente superada por la que requiere desplegar el cableado submarino hasta mar abierto y la conexión con tierra para evacuar la energía eléctrica, además del tiempo que requieren los trámites burocráticos para recabar todos los permisos necesarios para su instalación. Por todo ello, el bimep ya dispondrá del cableado submarino y de los permisos y avales medioambientales necesarios, de forma que las empresas simplemente deberán traer su tecnología a Euskadi y “enchufar“ sus dispositivos a las instalaciones del bimep. Un tractor de tecnología y conocimieno que permitirá hacer de la energía del mar un nuevo sector generador de riqueza, empleo y capaz de abastecer de energía de forma limpia.
Situado en mar abierto frente al puerto de Armintza, el bimep contará con una superficie total de 4×2 km delimitada por cuatro boyas de marcado y tendrá una capacidad de hasta 20 MW. Contará con un sistema de 4 cables submarinos de 5 MW y 13kV de potencia cada uno, a profundidades máximas que oscilan entre los 50 y 90 metros.
Todo ello supone que el bimep podrá albergar numerosos captadores de olas conectados al mismo tiempo y que producirán energía eléctrica que será trasladada instantáneamente hasta tierra. Junto con esta electricidad, también llegarán al centro de investigación de futura construcción en Armintza datos relativos al funcionamiento de los dispositivos a través de la red de fibra óptica que se desplegará paralela a los cables de evacuación eléctrica, de forma que las pruebas permitirán comprobar la tecnología, desarrollar nuevos avances, etc.
Para hacer realidad este proyecto es necesario superar diversos trámites administrativos y disponer de avales medioambientales. Precisamente el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino acaba de aprobar el proyecto del bimep que, al carecer de afecciones medioambientales y no afectar a ningún hábitat ni especie protegida, no será sometido al procedimiento de evaluación de impacto ambiental. Este visto bueno es un hito más dentro de las diferentes fases que deben registrarse para la creación de esta infraestructura marina.
La energía del mar en País Vasco
Junto con el bimep, el proyecto energético de Mutriku supone un notable avance para el desarrollo de la energía del mar en Euskadi y también en toda Europa. Y es que la de Mutriku también es una instalación singular en su tipo, existiendo solamente dos instalaciones en todo el mundo de características similares pero de menor alcance. La planta de aprovechamiento energético de las olas de Mutriku utiliza una tecnología denominada OWC (Columna de agua oscilante) y podrá abastecer a 600 personas gracias a sus 296 kW de potencia instalada y su producción eléctrica anual estimada en 600.000 kWh. En el momento en que entre en operación será la planta de mayor tamaño de sus características y la única que vierte toda la producción a la red de distribución eléctrica general.
El mar presenta unas prometedoras perspectivas de aprovechamiento energético ya que contiene una gran cantidad de energía. Almacenada en forma de olas, corrientes, mareas e incluso en forma de energía térmica, es una fuente de origen renovable con un aprovechamiento actual muy limitado pero para la que ya se están desarrollando diferentes prototipos capaces de obtener esa energía y convertirla en energía eléctrica aprovechable.
La energía del mar tiene un potencial de aprovechamiento energético que hacen de ella una energía de futuro. En Euskadi podría abastecer hasta el 10% de las necesidades eléctricas mediante esta fuente, con lo que se evitaría la emisión de entre 1,1 y 1,5 millones de toneladas de CO2 al año. Una fuente, que junto al resto de aprovechamientos renovables de Euskadi permite reducir el uso de otras fuentes más contaminantes.
Hoy en día la energía de las olas dispone de las tecnologías y dispositivos de aprovechamiento energético más avanzados y viables desde un punto de energético, económico y también medioambiental.