Gestora de Runes de la Construcció (GRC), empresa mixta dedicada a la gestión y reciclaje de los residuos de la construcción y la demolición (RCD), ha empezado a transportar fuera del Parque Natural del Cap de Creus (Girona) los 40.000 m3 de escombros procedentes del derribo de los bungalós de la antigua ciudad de vacaciones del Club Méditerranée (Club Med), en el marco del proyecto de recuperación paisajística de la reserva natural integral del paraje de Tudela y de su entorno. Los escombros no originarios de la zona y que no se puedan reutilizar dentro del parque se valorizarán para su comercialización y/o uso como material de relleno en actuaciones y obra civil en municipios próximos. Una de las destinaciones de estos escombros será la obra de construcción de una marina seca en Roses (Girona), donde se destinará un volumen estimado de 20.000 m3.
Según Ramon Tella, consejero delegado de Gestora de Runes de la Construcció, “la reutilización de los escombros cierra el ciclo de los materiales de la construcción ya que da utilidad a un material que, debidamente procesado, dispone de las características adecuadas como primera materia”. De esta manera, Tella confirma que “procuramos un ahorro importante en transporte ya que parte del material reciclado se quedará en el recinto del Club Med y el que no se quede al tener una mayor densidad permitirá optimizar las condiciones de transporte”.
Estación de reciclaje en funcionamiento
Gestora de Runes de la Construcció ha iniciado el tratamiento de los materiales procedentes del primer grupo de edificaciones que se empezó a derribar el pasado mes de julio. De acuerdo con el uso de las mejores técnicas disponibles para minimizar el impacto de esta actuación, se está utilizando maquinaria de pequeñas dimensiones y se han implementado medidas correctoras para proteger los equipos de la acción del viento, el uso de los sistemas de riego y una adecuada manipulación de materiales que prácticamente eliminan la producción de polvo.
La gestión de los escombros se ha planificado cuidadosamente para reducir al máximo el transporte de los materiales y valorizarlos (darle valor para otro uso) en lugar de llevarlos a un depósito controlado. En relación con las acciones para minimizar los desplazamientos de camiones, se están discriminando los tipos de escombros en el momento de la demolición, se clasifican y tratan los materiales –lo que supone reducir en más de un 50% su volumen original- y posteriormente se trasladan fuera del parque.
Materiales inertes originales
En relación a la valorización de escombros para la restauración, se usarán los materiales originales del Cap de Creus, la piedra de los zócalos y los pavimentos de los terraplenes. Dentro del parque, la restauración usará los materiales tratados para remodelar la orografía original y la integración paisajística del aparcamiento. Se aplicará rellenos en dos ámbitos: el aparcamiento Dalt de Tudela, donde se formaran montículos, y el terraplén del espacio que ocupaba el restaurante. Estas actuaciones se hacen únicamente con materiales inertes originales de este espacio y que se habían utilizado en la construcción del Club Med. Los escombros que no se puedan utilizar en el parque se valorizarán y se usarán en obras civiles de municipios próximos, como la marina seca en la avenida Nord de Santa Margarida en Roses (Girona).
Las obras ejecutadas por Gestora de Runes de la Construcció se enmarcan en el proyecto de restauración ambiental del paraje de Tudela que impulsan conjuntamente el Departament de Medi Ambient i Habitatge de la Generalitat de Catalunya y el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino del Gobierno de España. Esta actuación prevé la demolición total de las 443 edificaciones existentes, la eliminación y adecuación de viales y la recuperación paisajística con la finalidad de volver, al máximo posible, este espacio al estado anterior a su urbanización.