Los aparatos en modo de espera o «stand by» representan el 11% del consumo eléctrico de una vivienda.

Aunque no estén funcionando, los aparatos siguen consumiendo energía si se dejan en stand by. Apagar los aparatos que no esté utilizando puede suponer un ahorro de más de 100 euros al cabo del año.

Los aparatos en modo de espera o stand by siguen consumiendo electricidad. Muchos pensarán que el consumo en stand by es un consumo residual, pero lo cierto es que, en los últimos tiempos, dada la gran cantidad de electrodomésticos, aparatos y dispositivos electrónicos de todo tipo que hay en nuestros hogares y oficinas, el consumo en stand by supone el 11% de consumo en Europa.

Una nueva normativa, que entrará en vigor en enero de 2010, pretende atajar esta situación y recortar el consumo en stand by.

Los que más consumen en stand by

Entre los aparatos que más energía consumen cunado están en modo stand by destacan:

Para que se haga una idea, el consumo de un descodificador de TDT al cabo del año puede ser equivalente al de una lavadora que se ponga 5 veces a la semana.

El consumo en stand by, regulado

El 7 de enero de 2010 entrá en vigor el Reglamento nº 1275/2008 que afectará a todos los países europeos.

El objetivo de este reglamento es resolver los requisitos de diseño ecológico aplicables al consumo de energía eléctrica de los electrodomésticos, equipos electrónicos y de oficina que no se encuentran en modo de funcionamiento “normal”.

De entrada, esta norma establece que todos los aparatos deben permitir alguno de los dos modos de espera posibles (o los dos):

Los televisores, que gastan un 9% de la energía total que se consume en la Unión Europea, estarán sujetos a una regulación especial: la norma que los regulará entrará en vigor en 2012. La nueva norma que regulará el consumo de stand by supone una mejora, pero no basta. Sus limites siguen siendo, a juicio de la OCU, demasiado permisivos. Para conseguir acabar con el consumo superfluo que proviene de estos dispositivos en modo de espera o stand by, las normas deberían ser más estrictas, especialmente para aparatos como las consolas de videojuegos o los ordenadores. Para la OCU, debería ser posible apagarlos por completo (y así consumir 0 W), sin necesidad de reiniciarlos y hacer todos los ajustes.

Cómo consumir menos

 
 
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