Lafarge Cementos es la primera cementera en sumarse a la Campaña Madera Justa para promover la conservación de los bosques a través del uso de productos forestales con certificación FSC, un sello que garantiza el origen legal y sostenible de la madera y el papel que utiliza en sus procesos de producción.
Esta Campaña es fruto de los ejes fundamentales de trabajo de la Fundación Comercio para el Desarrollo (COPADE) y FSC España, en torno al Comercio Justo y el uso de madera certificada, como medio para frenar la deforestación y apoyar a las comunidades que dependen de estos bosques. Así, a través del acuerdo firmado por el director general de Lafarge Cementos, José Antonio Primo; el director general de COPADE, Javier Fernández; y la directora ejecutiva de FSC España, Elisa Pardo, Lafarge Cementos promoverá los objetivos ambientales y sociales de esta iniciativa al tiempo que refuerza sus compromisos en la materia.
“Nos sentimos orgullosos de participar en una campaña con fuerte proyección estatal, que forma parte de diversas redes de comercio justo y certificación de madera, tanto dentro como fuera de nuestras fronteras”, ha declarado José Antonio Primo, para quien “esta firma está en línea y refuerza el compromiso de la compañía con la conservación de la biodiversidad”.
Lafarge Cementos es el primer fabricante de cemento a escala mundial que garantiza el origen legal y sostenible de sus sacos. Esta iniciativa, fruto de la colaboración de Lafarge Cementos con WWF a través de su participación en la WWF Red Ibérica de Comercio Forestal (una alianza sellada en marzo de 2007), ha movido a la compañía a implicar a toda su cadena de proveedores: “no sólo hemos extendido nuestro compromiso a nuestros suministradores, también nos ha dado la posibilidad de demostrar, una vez más, la importante aportación de la industria a la sostenibilidad de los recursos naturales” ha apuntado Pilar Gegúndez, Directora de Medio Ambiente y Sostenibilidad de los Recursos de Lafarge Cementos.
“En el último año, casi 3 millones de sacos de la empresa, equivalentes a 260 toneladas de papel, llevaban el sello FSC, garantizando que la madera o el papel con el que se han fabricado los productos finales que utilizamos proceden de bosques gestionados de manera ambiental, social y económicamente responsable”, ha añadido Gegúndez, para quien la conservación de la biodiversidad y la protección del ámbito social que depende de la misma son los principales objetivos de esta campaña.