La ciudad de Castellón contará este año con el primer edificio con una fachada cerámica que purifique el aire de su entorno. Así lo ha anunciado el Vicealcalde de Castellón, Javier Moliner, junto al director general de Ceracasa, Carlos Cabrera, en la presentación de este proyecto que se desarrollará en la ciudad dentro del marco del City Lab donde Castellón se configura como un laboratorio de pruebas del sector cerámico.
"Se trata de una apuesta clara por convertir a la ciudad en un referente de innovación cerámica ya que la salida de la crisis de este sector tiene que pasar por la innovación en la que ya se encuentra trabajando desde hace muchos años", ha manifestado Moliner, quien ha recordado que la capital de La Plana ya dispone en la vía pública de juegos interactivos, se van a licitar diez pasos de detección de peatones, dispone de suelo para invidentes, marquesinas calefactadas y alrededor de 25.000 metros cuadrados de gres porcelánico en las aceras de la ciudad.
"Pero hoy damos un paso más y a los valores de ocio, comodidad e interactividad añadimos el valor de la sostenibilidad ya que queremos que el papel de la cerámica contribuya a purificar el aire del entorno del edificio donde será implantada esta medida porque apostamos por este uso público y por primera vez en la cerámica", ha explicado Moliner, quien ha concretado que se trata de un edificio destinado a instalaciones deportivas junto a la actual Escuela Oficial de Idiomas (EOI) junto a la carretera de Borriol. La obra también permitirá vertebrar la zona y la circulación.
La superficie útil del edificio será de más de 650 metros cuadrados y contará con cuatro pistas de pádel, una pista multiuso, un circuito de pistas para skate-board y el edificio que contará con este sistema sostenible en cerámica dispondrá de conserjería, dos gimnasios de distintas superficies, una sala de usos múltiples, vestuarios, aseos y locales técnicos, así como un vallado y la urbanización general de la parcela.
Instalación de referencia para el barrio
La fachada exterior irá forrada con el revestimiento cerámico que mejora la calidad del aire y que absorberá los óxidos de nitrógeno del entorno y se purifica el volumen de aire que consumen los 400 escolares que asisten al colegio Manel Garcia Grau. "Es una gran apuesta por la innovación cerámica, por las empresas de Castellón, por mejorar la calidad de vida, por los usos comprometidos de la cerámica con el medio ambiente y mantenemos vivo nuestro objetivo de convertir a Castellón en la capital europea de la cerámica", ha destacado Moliner. El Vicealcalde también ha afirmado que la obra comenzará en mayo, que tiene un plazo de ejecución de siete meses y un presupuesto de 1,4 millones de euros. "Sin duda será una instalación de referencia para el barrio", ha continuado el Vicealcalde.
Por su parte, Carlos Cabrera ha destacado que las funciones de esta cerámica "son como las de un árbol" y su efecto no se agota con el tiempo. "Se trata de una cerámica comprometida y que interactúa con el medio ambiente y vuelve inocuas las partículas con una gran capacidad catalizadora", ha especificado Cabrera, quien ha concretado que también actúa sobre la lluvia ácida.