La multinacional cementera Cemex ha aprobado la instalación de un filtro de mangas en su planta de Alcanar con una inversión de 4 millones de euros. Este filtro incorpora las últimas tecnologías del mercado en materia de emisiones, consiguiendo reducir los niveles de las mismas a menos de la mitad de las que alcanzan los filtros tradicionales, que en la actualidad están por debajo de las autorizadas por la legislación.
La misión del filtro de mangas en un horno de clinker es depurar de partículas los gases que se generan durante el proceso de fabricación, tanto en el horno como en el molino de crudo. El polvo recuperado en estos filtros se devuelve al proceso de fabricación incorporándose al producto, de forma que se limitan muy considerablemente las emisiones de partículas de la fábrica. Este filtro, en concreto, está diseñado para reducir las emisiones a un máximo de 5 mg por m3, una cantidad significativamente por debajo de las normativas más restrictivas de España, que en la actualidad alcanzan los 30 mg por m3.
La construcción e instalación del filtro durará aproximadamente un año, periodo en el que trabajarán en la instalación y puesta en marcha del mismo unas 25 personas. La inversión que conllevará el filtro de mangas ascenderá a 4 millones de euros, que se repartirán a lo largo de los ejercicios 2010 y 2011 y está previsto que comiencen las obras en torno al verano de este año.
La puesta en marcha del nuevo filtro, además de reducir considerablemente las emisiones, conlleva otras importantes mejoras para el mantenimiento de la instalación, que a partir de ahora, podrán realizarse con el horno en marcha, intervención que se hacía imposible con los tradicionales filtros electrostáticos.
Esta nueva instalación forma parte de las mejoras medioambientales aprobadas por Cemex para la fábrica de Alcanar, que además tiene previsto ir sustituyendo de forma paulatina y hasta 2015 los filtros de los otros dos hornos que posee la instalación por estos novedosos filtros de mangas.
Esta inversión medioambiental deja patente la intención de Cemex de instalar en Alcanar las mejores tecnologías disponibles en el mercado para que el impacto de su actividad en el entorno sea el menor posible. Además, pone de manifiesto la voluntad de permanencia de CEMEX en Cataluña y más concretamente en Alcanar, en donde está presente desde la adquisición de esta planta en 1992.