Endesa ha instalado en Málaga el primer telecontador inteligente para viviendas de España. El nuevo sistema ha quedado conectado a la red en Smartcity, el proyecto de ciudad eficiente desarrollado en la ciudad andaluza, y liderado por Endesa.
La puesta en marcha de este telecontador supone el punto de arranque para la sustitución masiva de los antiguos contadores en los domicilios, a través del plan de telegestión que Endesa ha puesto en marcha para sus más de 13 millones de abonados durante los próximos 6 años. El plan desarrollado por Endesa supondrá una inversión de más de 1.600 millones de euros, que generarán unos 2.000 empleos directos.
Gracias a este plan, la compañía se adelanta en tres años al plazo establecido para cumplir con la legislación europea y española en esta materia, y se coloca en la vanguardia tecnológica de las futuras redes inteligentes (Smarts Grids).
La telegestión permitirá al cliente conocer los datos de su consumo eléctrico de modo casi instantáneo, por lo que tendrá la posibilidad de elegir las mejores tarifas para sus necesidades energéticas y planificar su consumo. Además, todas las operaciones de alta, baja, reconexiones, control de potencia y cambios de tarifa se podrán realizar de manera remota e inmediata.
La telegestión ofrece ventajas también para el sistema eléctrico: proporciona información fiable y constante sobre el comportamiento de la red, lo que permite una mejor toma de decisiones de explotación; mejora la eficiencia global del sistema eléctrico y podrá evitar sobrecargas; contribuye a disminuir las pérdidas de distribución; y favorece la gestión de la demanda energética, contribuyendo a la eficiencia energética y a la reducción de emisiones de CO2.
Gracias a la instalación de los telecontadores, los clientes podrán disfrutar de las futuras aplicaciones comerciales y de gestión que llegarán en la próxima generación de redes eléctricas. De esta manera, Endesa está dando un primer paso efectivo hacia las redes inteligentes. Por eso, la compañía ha elegido Smartcity para la puesta en marcha de los primeros contadores. Smartcity es un proyecto pionero de ciudad eficiente desarrollado en Málaga, pilotado por Endesa e impulsado por once empresas, en el que se plantea un nuevo modelo de gestión energética en las ciudades para conseguir un aumento de la eficiencia energética, una reducción de las emisiones de CO2 y una apuesta decidida por el consumo de energías renovables. Se trata de una comunidad de 300 clientes industriales, 900 de servicios y 11.000 clientes domésticos.
Telecontadores de nueva generación
Endesa comenzó a trabajar en el proyecto en 2002, ante la necesidad de aplicar la telegestión a los clientes domésticos (contratos con potencia inferior o igual a 15kW) para que puedan planificar de forma eficiente, flexible y exacta los consumos eléctricos. En 2007 y 2008 se realizaron las primeras pruebas piloto con 12.000 clientes en Andalucía y Cataluña, que han permitido a Endesa ser la primera empresa española en desarrollar originariamente un sistema de telegestión de acuerdo a las directivas españolas y europeas en esta materia. La compañía, aprovechando la experiencia y conocimiento de Enel (que ya utiliza satisfactoriamente un sistema de telegestión similar para más de 32 millones de clientes en Italia), ha desarrollado una nueva generación de contadores basada en la última tecnología disponible y se ha adelantado al plazo que marca la legislación para su implementación masiva.
La instalación del nuevo contador se realizará sin molestias para los clientes y de un modo sencillo ya que no precisa de obras. Además del equipo que se instalará en el domicilio particular de los abonados, Endesa colocará en todos sus centros de transformación de baja tensión un sistema denominado "concentrador" que gestionará los contadores de manera automática y remota comunicando con ellos a través de la propia red eléctrica y utilizando un protocolo de comunicaciones PLC (Powerline Communications). La encriptación y autenticación de los datos garantiza al cien por cien la seguridad del cliente y de la información que circulará a través de la red.
Este protocolo de telecomunicaciones PLC, desarrollado con Enel, ya está abierto al sector a través de la sociedad Meters and More, creada por Endesa y Enel en Bruselas para gestionar la estandarización de la tecnología con cualquier compañía que pueda estar interesada a nivel europeo.
Endesa se encargará de sustituir los antiguos equipos de modo progresivo, comenzando por Málaga, Sevilla y Barcelona, y seguirá en ciudades como Badajoz, Zaragoza, Palma de Mallorca, Las Palmas de Gran Canaria y Tenerife, para terminar 2010 con 150.000 contadores inteligentes ya en funcionamiento. La fabricación del primer lote de 3.500.000 de contadores así como las operaciones de instalación en los domicilios se encuentran ahora mismo en fase de licitación.
El sistema de telegestión de Endesa ha sido reconocido recientemente con el premio European Utility Awards en el congreso Metering Europe 2009 en la categoría Business Performance, proyectos que mejoran el negocio. El galardón viene a confirmar la tecnología de vanguardia del proyecto de telegestión, el único de implantación masiva en marcha en Europa.
Beneficios de la telegestión
Para el cliente:
- Lectura de consumo exacta, en plazo y a distancia. -Mejor información sobre energía consumida favoreciendo el ahorro y la eficiencia.
- Mejor servicio comercial: operaciones remotas inmediatas (altas, bajas, modificaciones o reconexiones,…).
- Simplifica los cambios de potencia, incorporando el control al mismo contador lo que permite prescindir del Interruptor de Control de Potencia.
- Permite aplicar tarifas más flexibles.
- Permite la comunicación bidireccional cliente-compañía: ayuda a la gestión de cargas y de consumo de energía lo que favorece el ahorro y la eficiencia.
- Posibilitará ofrecer nuevos servicios de valor añadido que podrán proporcionar las redes inteligentes y lecturas remotas de otros suministros.
Para el sistema eléctrico:
- Posibilita la gestión inteligente de las puntas de demanda.
- Información más fiable sobre el comportamiento de la red.
- Mayor flexibilidad ante cambios regulatorios.
- Facilita la detección de fraude.