La Isla de la Innovación es un ambicioso proyecto con el que Avilés aborda un proceso de regeneración urbanística y ambiental, encaminado a la recuperación de su ría, tras más de cinco décadas de actividad industrial y siderúrgica.
Tras un disputado concurso internacional, la Sociedad Avilés Isla de la Innovación S.A., ha seleccionado a la UTE constituida por Taller de Ideas, la consultora Arup y Tecnia Ingenieros para su desarrollo.
El plan de regeneración urbana y cultural, cuyo mascarón de proa, el Centro Cultural Oscar Niemeyer, se encuentra en avanzada fase de construcción, da ahora un nuevo paso en su desarrollo. La iniciativa busca la regeneración integral, física y socioeconómica de 50 hectáreas de línea de costa, apostando por la generación de riqueza y la creación de más de 8.000 puestos de trabajo mediante la instalación de empresas del sector terciario. Esto contribuirá a convertir al triángulo Oviedo-Gijón-Avilés en una ciudad región de creciente protagonismo en la Unión Europea.
Uno de los puntos fuertes del proyecto es la búsqueda de la adecuada mezcla de usos entre residencial, espacios profesionales, hoteles, oficinas, locales comerciales y de restauración, espacios expositivos y de congresos. De esta manera, se pretende crear una ciudad rica y diversa; una ciudad viva durante las 24 horas del día los siete días de la semana.
En esos terrenos, además del Centro Cultural Internacional Óscar Niemeyer, también se plantea un nuevo puerto deportivo especialmente pensado para recibir cruceros y el Palacio de América, edificio concebido para representar a todos los asturianos emigrantes.
La movilidad será uno de los elementos que priorizarán la planificación urbana a desarrollar por Arup. El diseño sugerido potencia los espacios para peatones y ciclistas así como un sistema de transporte rápido, económico y eficiente que no sólo brindaría servicio a la isla, sino también al resto de la ciudad, sus habitantes y zonas empresariales. Otro aspecto clave será aportado por un plan de sostenibilidad ambiental con propuestas de ahorro y eficiencia energética, la búsqueda de simbiosis con las industrias existentes, la mejora de la calidad del agua y la modificación del frente fluvial para uso y disfrute de los ciudadanos de Avilés.
Según Javier de la Peña, coordinador de ingeniería de Arup en el proyecto, “uno de los objetivos claves de esta propuesta es lograr su viabilidad, tanto desde el punto de vista social y medioambiental, como del económico, jurídico y de la gobernanza para la futura gestión de la actuación”.
La actuación se coordinará con el proyecto de integración del ferrocarril, actualmente en fase de redacción, mediante el estudio de alternativas de paso sobre las vías que garanticen la accesibilidad.
Otra de las propuestas consiste en el desarrollo de un canal que no sólo aportaría una imagen distintiva sino que también serviría para delimitar la isla y separarla de la zona más industrial.
Según de la Peña, “a diferencia de la creencia habitual, es en esta situación de crisis cuando se deben desarrollar las estrategias y planes que permitan preparar suelos con perspectiva de futuro. Los procesos de tramitación urbanística son largos, y cuando la crisis empiece a remitir será necesario disponer de suelos listos para poder poner en marcha ágilmente actuaciones encaminadas a sustentar las nuevas actividades económicas que marcarán el nuevo período de desarrollo económico de nuestro país”.
Las autoridades locales prevén que la firma del contrato se realice en agosto de 2010. Se estima que los trabajos del proyecto de urbanización se realizarán en un plazo de 30 meses.