Este proxy tiene como objetivo permitir a PCs e impresoras entrar en estado de “reposo” sin perder su conexión a Internet y supone un gran avance para lograr reducir los consumos de energía en las empresas y en el hogar.
Océ, multinacional espacialista en impresión y gestión documental, ha colaborado con importantes compañías del sector de las TIC en el desarrollo de un estándar independiente que garantice la conexión a Internet cuando un equipo entra en estado de “ahorro de energía”.
Denominado Ecma ProxZzzy, este proxy se caracteriza por afrontar uno de los principales problemas de los ordenadores e impresoras: el hecho de que si entran en estado “de reposo” dejan de estar conectados a la red. Ésta es una de las razones principales por la que muchos equipos se mantienen en funcionamiento de forma continua, lo que provoca un gasto innecesario de electricidad y mayores emisiones de dióxido de carbono. Todo ello podría evitarse con el uso generalizado de un “proxy de red” para dispositivos como PCs, impresoras, consolas de videojuegos y decodificadores, por lo que Océ apoyado el desarrollo de esta norma y ha ofrecido la experiencia adquirida en el protocolo para impresoras SNMP. En este sentido, cabe señalar que, si ya de por sí los equipos electrónicos consumen energía cuando se encuentran “en reposo” (stand-by), éste es mucho mayor si el dispositivo no tiene la opción de pasar a este estado.
Disminuir el gasto de electricidad
Es un hecho que los dispositivos electrónicos desperdician gran cantidad de electricidad cuando se mantienen encendidos con el único objetivo de mantener su conectividad, cuando en ese tiempo podrían estar en reposo. Y si bien es cierto que la energía necesaria para mantenerse en contacto es pequeña, también lo es que la energía consumida por las impresoras y PCs de una oficina en ese estado equivale a la de un ordenador de escritorio a pleno rendimiento. Por ello, un proxy de baja potencia, tal y como se describe en el nuevo estándar, es clave para manejar las tareas fundamentales de red, permitiendo, así que el equipo esté “en reposo” cuando no esté activo.
Concretamente, la norma provee la arquitectura general de un proxy, además de los requisitos claves para “cazar” protocolos de selección. En este caso, el manejo del tráfico entrante puede requerir la generación de un paquete de respuestas, provocando una activación del sistema, o directamente ignorarlo. Asimismo, los proxies también se encargan de la generación de paquetes de rutina, de modo que los datos se intercambian entre un host y un proxy cuando el anfitrión entra en reposo y cuando se activa.
A fin de cuentas, la meta del proxy es ahorrar energía y, al mismo tiempo, mantener el dispositivo accesible al resto de la red. Y en ello es en lo que han trabajado las siguientes organizaciones: AMD, Apple, Hitachi, HP, Intel, Lawrence Berkeley National Laboratory, Lexmark, Microsoft, Océ, Realtek, Sony, Terra Novum y la Universidad de Florida del Sur.
Ecma ha enviado la norma a la Agencia de Protección Ambiental de EE.UU. para que los productos fabricados con el estándar ProxZzzy sean designados con la especificación ENERGY STAR.
“El desarrollo de ProxZzzy supone un gran avance para lograr reducir los consumos de energía en las empresas y en el hogar”, explica Luc Wijnhoven de Océ, que además destaca “la importancia que tienen estas medidas en nuestro país, dado que es uno de los que mayor dependencia tiene en importación de recursos energéticos en Europa, a lo que se suma el hecho de que en lo que llevamos de año ha aumentado en un 2,7% el consumo de energía eléctrica con respecto al mismo periodo de 2009”.
“Desde Océ hemos puesto nuestro granito de arena aportando nuestra contrastada experiencia en la búsqueda de tecnologías responsables con el medio ambiente, que a su vez es uno de nuestros objetivos a la hora de diseñar y fabricar nuestros productos”, comenta Luc Wijnhoven, Director Financiero y máximo responsable de RSC/RSE de Océ. “Si ya de por sí el consumo de sistemas en modo reposo supone en la actualidad un 11% del consumo de energía eléctrica en Europa, cuando los equipos están en funcionamiento porque no pueden estar conectados a Internet en este estado, dicho consumo se multiplica sin necesidad”, concluye.