El Ayuntamiento de Madrid ha presentado el "Manual para una vivienda más sostenible". De sus páginas se desprenden consejos en materia de ahorro doméstico energético, advertencias sobre el reciclaje y el uso de productos de limpieza, y el fomento de la arquitectura sostenible, además de sugerencias en el ahorro hídrico doméstico.
Los madrileños pueden preservar sus recursos hídricos con pequeños gestos como el uso eficiente de los electrodomésticos con programas como media carga o la instalación de perlizadores u otros dispositivos reductores de caudal en los grifos.
Elaborado desde la Dirección General de Sostenibilidad y Agenda 21 del Área de Medio Ambiente y en colaboración con la Federación de Usuarios y Consumidores Independientes (FUCI) de la Comunidad de Madrid, el Manual apuesta por que cada madrileño adopte también unos hábitos de ahorro y uso eficiente de la energía en su hogar. Mejorar el aislamiento y la climatización de las casas, el aprovechamiento de la luz natural o la adquisición preferente de electrodomésticos de alta eficiencia energética son algunas de las recomendaciones.
Autoevaluación
Comprobar si se es un ciudadano modelo en gasto enérgético pasa por rellenar las fichas de autoevaluación sobre hábitos domésticos. Si quedan dudas, el manual incluye dos anexos con la ubicación, horarios y normas de funcionamiento de los puntos limpios fijos municipales o las principales etiquetas identificativas de productos ecológicos y de comercio justo.
Ambos consumos, el de agua y el de energía, tienen sus reflejos en sendos textos, el Plan de Uso Sostenible de la Energía y Prevención del Cambio Climático, y la Ordenanza de Gestión y Uso Eficiente del Agua de 2006, reconocida y adoptada por otros municipios. Contempla una amplia batería de medidas para optimizar el uso de los recursos hídricos, fomentando su ahorro y su uso eficiente. A ello contribuye la extensa red de depuradoras y de tuberías que utiliza agua regenerada para usos como el riego y baldeo.
Uso sostenible de energía
En junio de 2008 se aprobó el plan energético que contempla más de 300 medidas entre las que destaca el fomento de vehículos con combustibles menos contaminantes para los que el Ayuntamiento está impulsando una red de suministro de combustibles alternativos, además de introducir exenciones tributarias.
El documento también contempla medidas de consumo energético de edificios y alumbrado público, como el ajuste del calendario de encendido y apagado o la limitación de temperaturas de calefacciones e instalaciones de climatización, los horarios de iluminación o el aislamiento adecuado de fachadas y envolventes.
Reutilización
Los residuos, su progresiva reducción, reutilización y reciclaje constituyen otro de los capítulos del manual. Madrid cuenta con un completo y moderno sistema de gestión de residuos, y con un parque tecnológico como el de Valdemingómez. Todo este esfuerzo municipal requiere para lograr su máxima eficiencia la participación de ciudadanos y comunidades de vecinos. El manual aclara posibles dudas sobre los distintos tipos de residuos y las pautas adecuadas para su gestión.
El texto se refiere también a los productos de limpieza, recomendando aquellos de menor toxicidad ambiental, y a las compras domésticas, moderando el consumo y dirigiendo la acción de compra a productos sostenibles. También en este campo el Ayuntamiento ha apostado decididamente por la compra pública verde mediante el Código de Buenas Prácticas en los procesos de contratación y el decreto del 15 de junio sobre introducción de criterios ambientales y sociales en la adquisición de productos forestales.