La consejera madrileña de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Ana Isabel Mariño, presentó el proyecto “Biogolf”, una iniciativa de la Comunidad de Madrid que pretende promover la biodiversidad de los campos de golf de la región, poner a su disposición una guía de buenas prácticas ambientales y crear una nueva certificación o sello ambiental para estas instalaciones.
Mariño, que presentó el proyecto en la Feria Internacional del Golf que se celebró la pasada semana en Ifema, defendió la importante interacción que existe entre el golf y el medio ambiente, ya que los campos ocupan y gestionan grandes espacios verdes, entornos cuidados, protegidos y vigilados que son hábitat de distintas especies de flora y fauna.
Por ello, el Ejecutivo autonómico, a través de la Fundación para la Investigación y el Desarrollo Ambiental (FIDA), va a poner en marcha este proyecto de sistema de gestión ambiental específico y adaptado a los campos de golf denominado “Biogolf”, que contempla la elaboración de una guía de ecoeficiencia y de fomento de la biodiversidad para que los campos puedan implementar medidas de sostenibilidad. Así, “Biogolf” se convertirá en una útil herramienta para lograr un mantenimiento de los campos con criterios de respeto hacia el entorno, al tiempo que se mejorará la competitividad de estas instalaciones.
“La sostenibilidad en los campos de golf se convierte en un valor añadido cada vez más apreciado por los jugadores, pero también por el conjunto de la sociedad –dijo Mariño-. Debe ser un fin básico entre quienes tienen el cometido de dirigir estos clubes”.
Introducción de especies autóctonas
Entre las medidas concretas que se propondrán a los campos de golf destaca la optimización del uso de los recursos hídricos mediante instalación de riego avanzados o plantación de césped con poco requerimiento hídrico. En este sentido, Mariño recordó que 22 campos de golf de la Comunidad de Madrid están ya adheridos al Plan de reutilización de Agua del Canal de Isabel II, y otros 14 se encuentran en proceso de solicitar su incorporación.
Además, para potenciar la biodiversidad de estos espacios, la Comunidad promoverá la plantación de especies de flora autóctona señalizando adecuadamente su nombre científico para fomentar al mismo tiempo la educación ambiental.
También se introducirán anfibios y reptiles acuáticos autóctonos en los puntos de agua del campo, se crearán nuevos puntos de agua y se instalarán cajas nido para aves insectívoras que se encarguen del control natural en estas instalaciones. Por último, se promoverá que los campos de golf realicen mejoras paisajísticas y ecológicas como restauración de zonas de interés, y un correcto mantenimiento de las masas forestales, estanques, lagos, lagunas, ríos y humedales en general.
La Comunidad de Madrid se va a convertir así en la primera región en desarrollar estrategias y acuerdos de custodia del territorio mediante acuerdos voluntarios con los gestores de campos de golf, recurso establecido en la Ley de Patrimonio Natural y la Biodiversidad.
También como prácticas sostenibles se implantarán políticas de ahorro energético potenciando las energías renovables, se minimizará el consumo de sustancias químicas como fertilizantes, se reducirá la producción de residuos y se fomentará el reciclaje.
Proyecto piloto y certificación ambiental
Cinco campos de golf de la región van a implantar “Biogolf” como proyecto piloto. Serán campos con características diferentes –en planeamiento, en construcción y ya en funcionamiento-, entre ellos Las Lomas Bosque en Villaviciosa de Odón, La Herrería en San Lorenzo de El Escorial y el Club de Golf Aranjuez. Todos ellos adoptarán las medidas propuestas por la Comunidad de Madrid a través de FIDA, con el objetivo de analizar los resultados obtenidos.
Gracias a este proyecto piloto, se obtendrá toda la información con la que será posible elaborar una guía de ecoeficiencia y fomento de la biodiversidad que recoja todas las recomendaciones para que puedan implantarlas los campos de golf que hay en la región.
Los campos de golf tendrán la posibilidad de implantar las medidas contenidas en esa guía, y tras realizar bioauditorías y ecoauditorías, en caso de que los resultados sean positivos, obtendrán el Sello de Certificación en Biodiversidad y en Ecoeficiencia –de nueva creación y que les concederá la Comunidad- con un compromiso de mejora continua.
“Los sellos de Biodiversidad y Ecoeficiencia servirán como un aliciente para los jugadores, y un plus de valor comercial y competitivo para los gestores de los campos de golf”, explicó la consejera.
El golf es un deporte practicado cada vez por más madrileños. Así, el número de licencias en la Comunidad, según datos de la Real Federación Española de Golf, ha tenido un crecimiento importantísimo en los últimos años: de las 58.163 licencias que había en 2003 se ha pasado a más de 95.500 en la actualidad. El golf es la disciplina deportiva que cuenta con más número de federados, por delante del fútbol (alrededor de 62.500).