Según uno de los arquitectos autores del proyecto, Juan Gómez Acosta, la ligereza y durabilidad del material, sus posibilidades cromáticas y el sistema de anclaje continuo de la fachada ventilada ULMA han sido las principales ventajas competitivas a la hora de elegir el sistema.
Recientemente han finalizado las obras de la nueva Residencia Geriátrica Hermanos Maristas en Cartagena, Murcia. Situada junto al Colegio Sagrada Familia de los HH. Maristas, una de sus particularidades es precisamente la ubicación. En este proyecto el objetivo de los arquitectos autores del proyecto, Francisco Marín Hernández y Juan Gómez Acosta era tener concentrados a los hermanos en un mismo lugar, junto al Colegio Maristas, de manera que desde las habitaciones se pudiera ver el patio del Colegio.
La fachada ventilada, de 3.600m2 de superficie, ha sido revestida con placas de hormigón polímero ULMA de 90 x 80 y de 60 x 80 cm. En cuanto a la diversa tonalidad de la fachada, han sido utilizados 6 colores estándar. El objetivo con el colorido era darle toda la alegría posible al rostro del edificio; con la luz interior, el color exterior y la ubicación junto al colegio con niños, se quería contrarrestar la idea de residencia geriátrica en la que llegamos al declive de nuestro ciclo de vida, consiguiendo así darle un semblante jovial.
Otra de las particularidades de la Residencia es la iluminación, cada habitación cuenta con 3 ventanales para que las habitaciones gozaran de abundante claridad. Se trata de un edificio con una cantidad considerable de vanos en serie y el juego de colores ha ayudado a conseguir que se descomponga la seriación, incrementándose la autonomía del plano de fachada, logrando así que sea incluso divertido.
El hormigón polímero en la residencia
El arquitecto Juan Gómez defendió la utilización del hormigón polímero para la fachada desde la prescripción hasta la colocación en obra. Según nos ha comentado, a la hora de tomar la decisión, la calidad y durabilidad del material, y el comportamiento mecánico fueron fundamentales, ya que la resistencia al choque es mayor en comparación a otros materiales y esto permite reducir espesores y ganar en ligereza. “Además, las posibilidades cromáticas que ofrece el material eran esenciales para darle juego a la fachada.”
Por otro lado, según afirma Juan Gómez, el sistema de anclaje continuo de la fachada ventilada ULMA ofrece mayores garantías en la seguridad con respecto al anclaje puntual de otras firmas, una cuestión que preocupaba mucho a los arquitectos debido a la ubicación de la obra, ya que se encuentra junto a un colegio. “A posteriori, puedo decir que se ha demostrado que acertamos en la elección. Hemos quedado muy satisfechos con el resultado, el servicio de instalación que ofrece ULMA es de gran calidad y se nota en el acabado final de la obra.”
En cuanto al comportamiento energético del edificio, Francisco Marín y Juan Gómez comentan que otra de las razones por las que se decidieron fue que las variaciones de temperatura son muy importantes en la región de Murcia, por lo que es más importante si cabe proporcionar un buen aislamiento al edificio. “El resultado de la fachada ventilada ULMA es muy bueno, realmente ventila fenomenal y la corriente de aire interna se puede llegar a palpar.”
Entre las características funcionales de la Residencia, la accesibilidad juega un papel importante. El edificio cuenta con un ascensor que baja hasta el nivel de la acera de la calle. Además, en los espacios del semisótano está equipado con un gimnasio y una piscina climatizada de agua salina para las sesiones de rehabilitación de los usuarios. A diferencia de otras residencias, cada planta cuenta con más de 200m2 de espacios destinados al esparcimiento, de manera que el ratio de m2 por usuario es superior a la media.
Ficha Técnica
- Nombre de la obra: Residencia Geriátrica Hermanos Maristas
- Emplazamiento: Calle Hermano Pedro Ignacio, Cartagena (Murcia)
- Fecha de finalización: 2010
- Superficie de Fachada Ventilada: 3.600 m²
- Suministro e instalación de la Fachada ventilada: ULMA Hormigón Polímero
- Presupuesto: 5.700.000 €
- Arquitectos:
- Juan Gómez Acosta
- Francisco Marín Hernández