La ciudad es un organismo complejo compuesto por una multitud de capas entrelazadas, vínculos e interacciones entre todos los elementos que la componen. El aumento del grado de complejidad de un entorno urbano multiplica exponencialmente el número de sinergias y las probabilidades de contacto entre todos los elementos, generando entornos urbanos más saludables y creativos. Por el contrario, el empobrecimiento de la complejidad urbana rápidamente tiene como consecuencia su aproximación al límite de viabilidad de todo el sistema. Este concepto es aplicable y afecta a todos los estratos que forman el tejido urbano: economía, cohesión social, movilidad, cultura, etc.
En este marco, dentro de los Cursos de Verano de la Unia, se celebra los próximos 19 y 20 de septiembre el encuentro Urban Social Design.
Urban social design: es el diseño de entornos/espacios y dinámicas que mejoran las relaciones sociales, generando situaciones de interacción y autoorganización entre las personas y su entorno.
El curso, coordinado por Belinda Tato y Domenico Di Siena, ofrecerá una mirada poliédrica sobre la ciudad explorando nuevas herramientas, dinámicas y metodologías sobre participación, creación colectiva, trabajo en red, nuevas tecnologías, cultura urbana e innovación social. El coste del curso es de 90 euros.