El gobierno noruego acaba de inaugurar el mayor centro experimental de captura de CO2, ubicado en el Centro Tecnológico de Mongstan (CTM). Alstom es uno de los dos proveedores tecnológicos e industriales seleccionados por los socios del CTM (Gassnova, Satoil, Shell y Sasol) para la construcción y los ensayos de las instalaciones de captura de CO2 situadas en las cercanías de Bergen (Noruega).
“Estamos encantados de participar, con nuestra tecnología de amonio refrigerado, en esta planta de pruebas en Mongstad. Es para nosotros de primordial interés que en el TCM podamos probar nuestra tecnología tanto en gases procedentes de la central térmica de gas, como en los generados en el proceso industrial de una refinería a cercana. Supone una valiosa experiencia para mejorar y extender el uso de esta tecnología.” comenta Patrick Fragman, Vicepresidente de Sistemas de Control Medioambiental y de Captura y Almacenamiento de Carbono de Alstom.
Tras una primera fase inicial, Alstom, junto con TCM llevará a cabo un proceso de pruebas y operación de 12 a 18 meses que dará comienzo durante el verano de 2012. Se espera que durante este período de pruebas surjan nuevos desarrollos y mejoras. Alstom considera que el TCM se convertirá en un atractivo emplazamiento para validar las potenciales mejoras, incluso una vez pasado el periodo de pruebas previsto
Tras el éxito de un proyecto piloto (5 MW, We Energies, US) y la operatividad de una planta de demostración (54 MW, AEP, US, en operación desde 2009), el proceso de amonio refrigerado de Alstom (Chilled Ammonia Process CAP) ha demostrado su potencial como tecnología puntera y de referencia a nivel mundial. El programa de validación de Alstom ha confirmado los niveles de rendimiento esperados, sin impacto medioambiental. Alstom ofrece una completa gama de soluciones con las más avanzadas tecnologías de captura de carbono, para aplicaciones industriales y energéticas. Actualmente está desarrollando 16 proyectos de Captura y Almacenamiento de Carbono junto con varios socios en la industria y los servicios públicos en todo el mundo.
Eficacia de las tecnologías de captura y almacenamiento de carbono (CAC)
Teniendo en cuenta que los combustibles fósiles representarán el 60% de la generación de electricidad en 2030 , la aplicación de tecnologías de captura y almacenamiento de carbono es clave para abordar el desafío del cambio climático.
Alstom se centra actualmente en dos soluciones principales, que han demostrado su eficacia y rentabilidad: la captura de postcombustión y la captura de combustión por oxígeno.
Estas tecnologías serán las soluciones más sostenibles y viables en términos económicos ya que, además, son las que pueden adaptarse a la base instalada, algo fundamental para conseguir los objetivos de emisiones del futuro.
Según revelan los resultados de un detallado estudio basado en 13 proyectos piloto de Alstom, el coste eléctrico generado por una central de carbón con tecnología de CAC (que estará disponible comercialmente en 2015 y permitirá capturar el 90% del CO2 emitido) estará entre 6,5 y 8,5 céntimos de euros/kWh dependiendo del combustible y la localización. Este coste ya es competitivo y mejorará a lo largo de los años según vaya madurando la tecnología. La misma conclusión se aplica en una central eléctrica de ciclo combinado que utilice CAC.
Tras 10 años de desarrollo, la tecnología de CAC está a punto de su implantación a gran escala. Se está abriendo un nuevo mercado global, donde Europa está bien posicionada por su liderazgo en esta tecnología, por los pasos que se han dado para crear un marco regulatorio y por las decisiones que se han tomado para incentivar el desarrollo de la CAC a través de la financiación de plantas piloto.
Alstom siempre ha mantenido que todas las soluciones para reducir emisiones, al tiempo que se genera la energía necesaria para el desarrollo económico y el bienestar social, serán necesarias para abordar el cambio climático, principalmente incrementando el uso de todas las fuentes de energía renovable, mejorando la eficiencia energética tanto en las nuevas plantas como las que ya existen y desarrollando la tecnología de captura y almacenamiento de carbono para las instalaciones que utilizan combustibles fósiles.