El Gobierno de Navarra comenzará este año a desarrollar, con la colaboración de agentes sociales y empresariales, una serie de acciones de impulso de la biomasa forestal como sector de dinamización de la economía y el empleo, fundamentalmente en el ámbito local. Las medidas, que se desarrollarán durante esta década, optimizarán de forma sostenible un recurso renovable propio de la Comunidad Foral.
El impacto potencial en cuanto a empleo se sitúa en torno a los 1.650 puestos de trabajo directos e indirectos, que se sumarían a los 4.000 que ya sostiene el sector en la actualidad, repartidos en 300 empresas de explotación forestal, serrerías, embalajes, almacenes y centros de fabricación.
En términos energéticos, se prevé incrementar de forma notable durante esta década la cuota de la biomasa en el consumo final de energía, pasando del 3,9% de 2010 al 5% en 2020, esto es, en un 28%.
Estas previsiones, conforme al III Plan Energético de Navarra horizonte 2020 y el Plan Moderna, pretenden contribuir a potenciar la economía verde, una de las tres ramas principales, afianzando el liderazgo de Navarra en las energías renovables y convirtiéndola también en un referente en el campo de las eficiencia energética.
Para la consecución de estos objetivos, el Gobierno de Navarra ha aprobado en su sesión de hoy la creación de una comisión mixta, que estará integrada por representantes de la Administración Foral, la Federación Navarra de Municipios y Concejos, el Centro Nacional de Energías Renovables – CENER; y agentes del sector: Asociación de Empresarios de la Madera de Navarra (ADEMAN); Asociación Forestal de Navarra (FORESNA-ZURGAIA, que aglutina a propietarios privados y públicos); fabricantes de combustible de biomasa; y la Asociación de Instaladores de Fontanería, Calefacción, Aire Acondicionado, Gas y Afines de Navarra.
La comisión mixta impulsará tres tipos de acciones, dos de ellas orientadas al incremento de la oferta y la demanda y una tercera de carácter transversal:
- Producción y suministro: Con el fin de estimular la oferta, se desarrollarán acciones dirigidas a la gestión sostenible de la biomasa forestal y de apoyo a la producción competitiva. El objetivo es incrementar la movilización de madera cerca de un 40% (pasar de 400.000 a 560.000 toneladas anuales). Asimismo, el Gobierno quiere elevar el porcentaje de superficie forestal certificada al 75% (actualmente, es del 52%).
- Demanda: Para incrementar el consumo de biomasa forestal se priorizará el uso de la misma tanto en las nuevas instalaciones térmicas de los edificios públicos como en las reformas, asimismo se impulsarán proyectos singulares para la implantación de calefacciones de distrito, tanto en nuevos desarrollos como en renovación (caso del barrio de Lourdes, en Tudela). Para contribuir al impulso de la demanda y reducir su factura energética, en su sesión de hoy, el Gobierno ha acordado priorizar el uso de la biomasa en la renovación de instalaciones térmicas de sus edificios – hospitales, institutos, etc-, mediante contratos de servicios energéticos, lo que permitirá que estas instalaciones se autofinancien por los superiores rendimientos en comparación con la instalación sustituida, además de por el menor precio del combustible.
- Acciones transversales: Cooperación entre empresas, centros y universidades para el fomento del I+D+i, programas de formación y de sensibilización social.