Metro de Madrid ha puesto en marcha un nuevo sistema de ventilación con el que la compañía del suburbano madrileño ahorrará más de tres millones de euros. Esta técnica recibe el nombre de free-cooling o enfriamiento gratuito, y consiste en la mejora de la eficiencia energética mediante la reprogramación del programa informático de los sistemas de ventilación, que permitirá que se pongan en marcha en las épocas y en los horarios en los que la temperatura es más adecuada y el consumo energético es más económico.
El consejero de Transportes, Infraestructuras y Vivienda, Pablo Cavero, presentó esta nueva iniciativa donde recordó que Metro de Madrid ha iniciado la ejecución de un paquete de medidas que supondrán un ahorro de 12 millones de euros anuales para la compañía en su factura energética, dentro del Plan de Optimización de recursos que se está aplicando para reducir gastos en todas las partidas posibles con la menor repercusión para los viajeros.
Cavero explicó que “este nuevo sistema de programación, que se ha instalado en los 900 ventiladores distribuidos entre túneles y estaciones tiene dos ventajas fundamentales, por un lado, el ahorro de energía y su consecuente coste en la factura y, por otro lado, el ahorro de costes de mantenimiento porque aumenta la vida útil de los equipos, con la consecuente reducción de las incidencias”. Además, según explicó el consejero, mantiene la salubridad y la calidad del aire porque lo renueva en túneles y estaciones y limita la carga térmica y en consecuencia la temperatura.
Ahorro de energía en los trenes
La masiva instalación durante los últimos años de aire acondicionado en los trenes, ha recalentado los túneles, que no llegan a enfriarse en el invierno. Se estima en unos tres grados el promedio de aumento. Cuando llega el verano, con un aire ya caliente, los trenes han de consumir todavía más energía para refrigerar, lo cual aumenta todavía más el problema.
Por esta razón, reducir la temperatura de los túneles, mediante freecooling, genera un importante ahorro en el consumo de energía de los trenes. En verano, se evitará introducir aire caliente durante el día, ventilando de forma masiva durante las noches, ya que bajan las temperaturas.
Además, el coste de la energía no es el mismo a lo largo de las 24 horas del día, por lo que resulta más económico ventilar las instalaciones durante los periodos bonificados.