Flexbrick, un sistema industrializado basado en el concepto de láminas cerámicas flexibles para la construcción de revestimientos (pavimentos, fachadas, cubiertas) y estructuras laminares (paneles, catenarias, bóvedas), que permite múltiples opciones de diseño, con distintas configuraciones de tejidos cerámicos y gamas cromáticas, cuenta, ahora, con la colaboración de ROCKWOOL como partner de aislamiento de lana de roca para una mayor protección del edificio.
Esta unión se hizo patente en la última feria de Construmat, donde Flexbrick presentó su nuevo catálogo interactivo, una herramienta donde se explica cómo realizar diseños personalizados y que se adapten a todos los bolsillos, desde obras sencillas hasta otras de mayor complejidad. En el mismo, se mencionaron las ventajas de poder sumar al sistema las prestaciones técnicas de ROCKWOOL.
A pesar de su corta existencia, aproximada de dos años, Flexbrick se ha convertido en un sistema de referencia para arquitectos y prescriptores. Hoy, es una empresa dedicada al desarrollo, la comercialización, el diseño y la construcción de múltiples sistemas constructivos basados en tejidos cerámicos, y en continua innovación.
Por su parte, ROCKWOOL lidera el sector del aislamiento, gracias a sus soluciones con lana de roca, que aporta cuatro beneficios en un solo producto: Aislamiento térmico, acústico, protección contra el fuego y durabilidad. La multinacional también destaca por su lucha por el cuidado medioambiental y la sensibilización de la sociedad sobre la necesidad de reducir las emisiones de CO2.
Ambos se han unido en la elaboración del nuevo Flexbrick para sumar, a sus propiedades creativas, las especificaciones técnicas de ROCKWOOL. De este modo, se han creado soluciones efectivas para viviendas familiares, residenciales, centros comerciales, administrativos, hospitalarios, etc., adaptándose a cualquier tipo de diseño, ya sea inclinado o plano.