El Gobierno de Navarra ha recibido alrededor de 2.600 peticiones de información sobre la certificación energética de edificios desde que el pasado 1 de junio entrara en vigor la obligatoriedad de este tipo de informes para la venta o alquiler de viviendas.
De las 2.600 consultas recibidas, en torno a 2.000 corresponden a llamadas telefónicas, con una media diaria de 12, y 600 se han realizado por correo electrónico, de los que se reciben en torno 3 cada día.
La información solicitada se refiere tanto a la aplicación de la normativa como sobre el registro de profesionales y certificados. Cabe recordar que según el Real Decreto 235/2013, desde el día 1 de junio de 2013 es obligatorio que todas las edificaciones destinadas a la compra-venta o alquiler cuenten con un certificado de eficiencia energética que deberá incorporarse a un registro público y será el propietario el responsable de encargar la realización de la certificación energética y de proceder a su registro.
En el caso de Navarra, el mencionado registro es de carácter gratuito, y puede realizarse de manera telemática; depende de la Dirección General de Industria, Energía e Innovación, y ofrece asimismo un listado de profesionales acreditados para expedir la mencionada certificación.
La solicitudes provienen tanto de ciudadanos que demandan información acerca de la aplicación de la normativa, de cómo encontrar profesionales cualificados y del coste de la certificación; de profesionales, con peticiones sobre el registro de profesionales, consultas técnicas sobre el de certificados y sobre la aplicación de la normativa; y, en el último mes, a raíz de una campaña de inspección, de inmobiliarias, con demandas más específicas sobre las exigencias de publicidad del certificado.
Desde que el pasado 1 de junio se estableciera la obligatoriedad de los certificados energéticos y su incorporación al registro, se han producido un total de 8.497 inscripciones, con calificaciones que van desde la A (la más alta) hasta la G (la más baja), tanto en consumo de energía como en emisiones. De ellas, y por lo que se refiere al consumo de energía, 29 corresponden a edificios que cuentan con la calificación A; 73 están calificadas como B; 476 como C; 1.799 obtienen una D; 4.186 se califican como E; 808 como F; y 1.126 edificios obtienen la calificación G, la más baja. En cuanto a emisiones, 66 edificios tienen la calificación A; 116 la B; 674 la C; 2.080 se califican con D; 3.600 con E; 879 con F; y 1.82 con G.