La Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA) reforzó su llamada a la acción del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) para limitar el aumento global de la temperatura y evitar un cambio climático catastrófico en un comunicado. La transición hacia una matriz energética mundial sostenible debe acelerarse, ha dicho la Agencia, a fin de reducir el dióxido de carbono mundial (CO2) y las emisiones en un 40-70 por ciento en comparación con el año 2010 para el año 2050. Las energías renovables son la mejor opción económica y tecnológicamente probada para mantener los niveles de CO2 por debajo del umbral aceptado de 450 ppm.
El Director General de IRENA, Adnan Z. Amin, instó a la comunidad internacional a la vía rápida de las energías renovables en la lucha contra el cambio climático en la Cumbre Mundial de la Economía Verde en Dubai celebrada en abril. El último informe del IPCC confirma que evitar el cambio climático catastrófico es posible si actuamos ahora. Pero tenemos que actuar con decisión. La energía renovable, en combinación con la eficiencia energética, proporciona la ruta más económica y tecnológicamente maduros como para producir el cambio necesario. (…) El despliegue acelerado de la energía renovable reduce significativamente las emisiones de dióxido de carbono relacionadas con la energía a un costo razonable, y también proporciona otros beneficios, como una mayor seguridad energética, más empleos locales y la creación de valor, y un medio ambiente más limpio y saludable.
Con una concentración media de CO2 en la atmósfera de 398 ppm en el comienzo de 2014, la energía renovable ofrece un camino para bajar las emisiones de CO2 relacionadas con la energía y ayudará a evitar una acumulación de CO2 atmosférico más allá de 450 ppm, el umbral ampliamente aceptado para mantener el aumento de la temperatura global a 2ºC por encima de los niveles preindustriales para el 2100. Con base a la trayectoria actual del mundo, las emisiones anuales de CO2 relacionadas con la energía aumentarán de 30 gigatoneladas (Gt) en 2010 a 41,4 Gt en 2030, según estimaciones de la IRENA. La hoja de ruta mundial IRENA para la transición hacia un futuro sostenible de la energía, «Remapear 2030», que se publicará en mayo, muestra que las energías renovables puede reducir las emisiones en un 8,6 Gt a un estimado de 32,8 Gt en 2030.
Sobre la base de cifras de la Agencia Internacional de la Energía, la eficiencia energética puede producir una reducción adicional de 7,3 Gt, lo que resulta 25,5 Gt en 2030. Además de las mejoras en la eficiencia energética, esta ruta incluiría una cuadruplicación de la participación de las fuentes renovables de energía modernos en la matriz energética mundial en 2030.
La transición de las energías renovables también tiene impactos socioeconómicos positivos. Las inversiones en energía renovable creará un aumento de 11 millones de empleos en todo el mundo para el año 2030, y reducir la dependencia de la energía importada. Las tecnologías renovables son la solución más económica para la nueva capacidad en un número creciente de países y regiones. La energía renovable ha entrado en un círculo virtuoso de la caída de los costos, el aumento de la implementación y el progreso tecnológico acelerado.