La promoción de viviendas Residencial Marsella, de la firma LNC de INVERSIONES S.A. (Grupo Premier), es la primera en España en recibir el certificado de sostenibilidad BREEAM® ES Vivienda en fase de diseño, con la clasificación de Aprobado.
Se trata de 40 viviendas de 12 tipologías con una superficie total de 3.630 metros cuadrados, ubicada en la zona de Villa de Vallecas, en Madrid, y en la que los ahorros estimados respecto a una edificación similar estándar son del 18% en el consumo de agua, de 44,85 KWh/m2 en consumos energéticos, y de 49,66 KgCO2/m2 en términos de emisiones.
La elección de este certificado se ha debido a su prestigio no sólo a nivel nacional sino también internacional y especialmente a nivel Europeo y estamos muy orgullosos de haber obtenido nuestro primer certificado BREEAM en Fase de Diseño y nuestra próxima meta es obtenerlo en Fase de Postconstrucción de forma previa a la entrega a nuestros Clientes
, afirma Alfonso Gómez Puente, director del departamento técnico de la promotora.
Proceso de evaluación
El Asesor BREEAM® ES responsable de la evaluación ha sido Marta Pérez Hernández, de la organización autorizada Taila Arquitectura Sostenible. Un proceso de evaluación del cumplimiento de los requisitos exigidos por la metodología en 10 categorías: Gestión, Materiales, Transporte, Residuos, Agua, Salud y Bienestar, Contaminación, Energía, Uso del Suelo y Ecología, e Innovación.
Aspectos sostenibles
El proyecto ha sido elaborado por Arquitectos García Alba, siendo AVINTIA el contratista principal, VYGAS la firma encargada de la ingeniería de instalaciones y ASDINI GREEN del informe ecológico.
Algunos de sus aspectos más destacados desde el punto de vista de la sostenibilidad son la obtención de la calificación energética A, la instalación de griferías de bajo consumo y de calefacción y agua caliente centralizada con caldera de biomasa de alto rendimiento y eficiencia energética con muy bajas emisiones de CO2.
El impacto ecológico del solar será mitigado mediante un proyecto de ajardinamiento con plantas autóctonas, instalación de compostadora para la gestión de los residuos de poda, y uso de riego por goteo con incorporación de sensores de humedad del suelo para el cual se empleará agua recuperada de un sistema de aguas pluviales. Se ha conseguido la reutilización, reciclaje o valorización de casi la totalidad de los residuos de obra y han sido implementadas medidas orientadas a reducir al máximo las perdidas caloríficas del edificio en la carpintería exterior y persianas, en suelos de viviendas sobre zonas no calefactadas y en el aislamiento termo acústico mejorado en el interior de la fachada.
Otras medidas implementadas han sido una iluminación exterior e interior de zonas comunes mediante luces tipo LED y bombillas de bajo consumo, el equipamiento de varios puntos de recarga de coches eléctricos en el garaje, y ascensores eficientes con iluminación LED y modo de espera en stand-by.