El consejero de Fomento, Vivienda, Ordenación del Territorio y Turismo del Gobierno de Extremadura, Víctor del Moral, se ha reunido con representantes del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universidad de Extremadura (Uex) para estudiar fórmulas de colaboración que impulsen la utilización de áridos reciclados en las obras de mejora de las carreteras.
Del Moral ha explicado que durante la reunión se ha abordado la posibilidad de suscribir un convenio de investigación que permita desarrollar nuevos materiales de construcción procedentes de residuos de la construcción y demolición que ofrezcan ventajas tecnológicas e impliquen una mejora del medio natural.
“La idea del Gobierno de Extremadura es poner la innovación al servicio de la construcción y el medio ambiente”, ha destacado el titular autonómico de Infraestructuras.
A la reunión han asistido Moisés Frías e Isabel Sánchez de Rojas, doctores en Ciencias Químicas del Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo Torroja, perteneciente al CSIC; César Medina, en representación de la Uex; y Montaña Jiménez, directora general de Carreteras y Obras Hidráulicas.
Los áridos reciclados pueden ser empleados en la conservación, mantenimiento y construcción de infraestructuras viarias y permiten solucionar dos problemas.
Por un lado, disminuir el volumen de residuos acopiados en vertederos, y por otro reducir el volumen de recursos naturales empleados en la fabricación de mezclas bituminosas, pavimentos de hormigón, estabilización de suelos con nuevos conglomerantes hidráulicos, bases y sub-bases de carreteras y elementos de seguridad como vallas de hormigón.
La tasa de reciclaje y utilización de residuos de la construcción varía significativamente en la actualidad de unos países a otros, oscilando entre el 5% en Portugal y más del 90% en los Países Bajos, Dinamarca o Alemania.
La media en la UE es del 46%. En España no hay datos oficiales sobre el nivel de reciclaje, pero se estima que ronda el 17%, según datos del catálogo de residuos utilizables en la construcción del CEDEX. Esto demuestra que las administraciones deben realizar un esfuerzo para elevar este índice hasta equipararlo a la media comunitaria.