La compañía española Frutiner tiene una larga tradición en el cultivo de frutas y su comercialización. Cuenta con sucursales en Madrid, Barcelona, Vila Real, Almazora y recientemente ha construido una nueva nave envasadora de frutas en Onda, Castellón.
Frutiner buscaba un sistema de cubierta de alta calidad para cubrir una superficie total de 11.000 m2. El sistema de cubierta debía ser lo suficientemente fuerte para permitir la colocación de una instalación fotovoltaica para autoconsumo. La propuesta elegida de Sika fue un termoplástico de alto rendimiento que cumple con los requisitos técnicos, económicos y ambientales exigidos por el cliente.
El sistema de cubierta Sika especificado es una membrana impermeabilizante de color blanco que fue elegido por el cliente, no sólo gracias a su alto rendimiento técnico, sino también porque cumplía de sobra sus expectativas en cuanto a precios.
En climas cálidos como en Castellón, las cubiertas blancas, con membranas altamente reflectantes son capaces de reducir la absorción de calor por parte de un edificio así como su consumo de energía de refrigeración, manteniendo así los costos de energía más bajos. La solución de Sika, por tanto, es rentable no sólo en términos del desembolso inicial de la construcción, sino también en lo relativo al potencial ahorro de energía y de la huella de carbono por el alto poder reflexivo a lo largo de todo el ciclo de vida del edificio.
Para convencer al cliente sobre los beneficios adicionales de la membrana termoplástica altamente reflectante frente a las soluciones bituminosas en color negro aplicadas en tradicionalmente España, Sika ha realizado un análisis del ciclo de vida (LCA) de dos soluciones similares: membranas de color beige y el blanco altamente reflectante.
Análisis del Ciclo de Vida: objetivos y alcance
El análisis del ciclo de vida es un método estándar para evaluar y comparar las entradas, salidas y potencial impacto ambiental de los productos y servicios durante su ciclo de vida. Los ACV son cada vez más reconocidos como la mejor forma de evaluar el rendimiento de la sostenibilidad de los productos y sistemas. Este método permite una evaluación del impacto ambiental de los sistemas en todo su ciclo de vida y por lo tanto selecciona una efectiva relación costo-solución tanto en términos de la construcción inicial los costes y la energía potencial y el ahorro de la huella de carbono que vienen con la instalación de una membrana blanco.
Resultados
En los siguientes gráficos se muestran los ahorros en refrigeración/calefacción para ambas membranas.
Las membranas reflectantes de colores claros pueden ayudar reducir el consumo de energía reducciendo las cargas de calefacción/refrigeración.
Para el área de superficie total de proyecto 11.000m2, los resultados de un sistema de techado tratado con color beige Sarnafil TS 77-18 y otro con blanco Sarnafil TS 77-18 SR demuestran ahorros significativos debido a la reducción de carga de refrigeración en comparación a un sistema de cubierta negro. Los ahorros potenciales tanto de energía como de carbono estimados superan los impactos en todo el ciclo de vida del sistema en menos de 5 años. Se estima, además, que con la membrana blanca se podrían ahorrarse casi 8.000 GJ de refrigeración/calefacción de energía en comparación con la membrana de color beige en un período de 20 años.
Sobre la base de la reducción del impacto global y, por lo tanto, de los costes (económicos y ambientales) a largo plazo, los resultados de la evaluación son lo suficientemente concluyentes como para que el cliente optara por instalar la membrana blanca de alta reflexión solar en lugar de la membrana beige.
En edificios sensibles al clima, como es el caso de este centro de procesado de frutas, donde las frutas se almacenan para distribución y requieren unas condiciones climáticas especiales incluyendo una temperatura y humedad específicas, resulta muy útil que las cubiertas aseguren unas temperaturas moderadas.