WWF y la Fundación Reale han presentado el informe Proyecto Piloto de Rehabilitación Energética de un edificio residencial en Madrid. Lecciones aprendidas, dentro del marco del proyecto, Mejora la energía de tu Comunidad. Esta iniciativa, puesta en marcha hace dos años, tiene como objetivo promover una ciudad más sostenible y eficiente.
Este proyecto piloto se ha realizado, con la colaboración de la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo del Ayuntamiento de Madrid (EMVS) en un edificio de 10 viviendas construido en 1962, que tenía graves problemas de derroche energético por sus características constructivas y en el que los vecinos sufrían en muchos casos condiciones de pobreza energética. Su rehabilitación, que comenzó en diciembre de 2013, ha formado parte de la convocatoria europea de I+D para proyectos de rehabilitación energética, Retrokit.
El resultado de la intervención energética, que ha costado 255.000 euros, siendo costeado el 75% por la Administración con un máximo de 21.000 euros por cada propietario, ha permitido que este edificio haya escalado dos letras en la escala de eficiencia energética, de la F a la D. Este resultado se ha conseguido mediante la impermeabilización con lana de roca, la instalación de ventanas con doble vidrio y ventilación forzada, y el uso de calderas de condensación en las viviendas que así lo han requerido.
El edificio ha sido experiencia piloto de varios elementos innovadores como paneles mixtos térmicos-fotovoltaicos integrados en la fachada que permiten la alimentación de la ventilación mecánica en ventanas y precalentamiento para agua caliente sanitaria, o la instalación de cajas horizontales integrando las persianas, lo cual permite ventilar la casa sin necesidad de abrir las ventanas.
Según Georgios Tragopoulos, Técnico de Eficiencia Energética de WWF España, con estas medidas pioneras utilizadas para la rehabilitación energética se ha conseguido reducir la demanda energética un 75% y el consumo energético un 42%. Además, la factura energética de los vecinos se reducirá, según la consultora Creara, en 233 euros anuales por vecino y dejará de emitir a la atmósfera un 36% de emisiones de CO2 anuales.
Otro de los aspectos destacados de esta rehabilitación ha sido la mejora de la calidad de vida de los vecinos, puesto que en términos de confort y reducción de ruidos externos se ha mejorado exponencialmente.