Afelma (Asociación de Fabricantes Españoles de Lanas Minerales Aislantes) vuelve a solicitar un Plan Nacional urgente de rehabilitación térmica y acústica de edificios para posibilitar la reactivación del sector de la construcción. La polivalencia de las lanas minerales aislantes, puesto que se trata de un producto que ofrece aislamiento térmico, acústico y protección frente al fuego, ha permitido, según esta asociación, la estabilidad del mercado de la rehabilitación.
En 2014 las ventas en España de lanas minerales aislantes (lanas de vidrio y lanas de roca) superaron en casi 70.000 m3 las ventas de 2013, hasta superar los 1,5 millones de metros cúbicos, lo que representa un incremento del 4,73% en relación con el ejercicio anterior. Sin embargo, este comportamiento no compensa el estancamiento de las viviendas iniciadas ni tampoco el retroceso de las finalizadas, poniendo de manifiesto la ausencia de planes de estímulo a la rehabilitación.
A lo largo de 2014 se iniciaron cerca de 35.000 viviendas, cifra similar a la del ejercicio 2013, mientras que se finalizaron más de las 46.800, un 27,8% menos que el año anterior (64.800). Por lo que respecta a las rehabilitaciones, a lo largo del año 2014 se reformaron casi 24.400 viviendas, una cifra ligeramente inferior a la de 2013, y 28.000 edificios. Es cierto que en la actividad rehabilitadora los datos apuntan hacia una cierta estabilidad, pero con unas cifras alejadas de los 40.000 visados para la rehabilitación de edificios que había en 2010 (-32%) y 32.600 viviendas (-31%).
Ante la ausencia de estímulo a la rehabilitación, Afelma propone un Plan que contenga formas de financiación a bajo interés y deducciones fiscales, aunando esfuerzos públicos y privados y ser coordinado por el Gobierno. Además según la asociación es necesario habilitar ayudas anuales a través de diversas fórmulas que posibiliten afrontar la rehabilitación eficiente equivalente a 350.000 viviendas al año, con lo que se ahorrarían a lo largo de la vida útil de las mismas, 36 millones de TEP y 130 millones de toneladas de CO2 con el consiguiente ahorro de la factura energética nacional y de los ciudadanos.