El One World Trade Center de Nueva York cuenta con los ascensores más rápidos de América. Cuentan con tecnologías personalizadas que les permiten viajar a casi 37 km/h y subir hasta el piso 102 en sólo 60 segundos, a la vez que ahorran más de 78.000 kWh anualmente.
El sistema de elevación de estos ascensores contribuye a la conservación de la energía del edificio. La colocación de luces LED en los techos de las cabinas ahorrarán más de 78.000 kW/h anualmente, en comparación con las bombillas halógenas, suficiente para abastecer un hogar promedio de EE.UU durante más de siete años. Además, las unidades regenerativas recapturarán la energía del elevador para devolverla al sistema eléctrico del edificio.
Por lo que respecta a la velocidad de los ascensores, estos están equipados con tecnologías especiales para conseguir y mantener el movimiento a velocidades récord. Las cubiertas de aluminio aerodinámicas desvían el aire y mantienen la velocidad de manera similar al de un alerón de un coche. Por otro lado, su sistema de guía especial minimiza las vibraciones asegurando un viaje más suave y los materiales de insonorización de las cabinas del ascensor y de las puertas limitan el ruido.
Los ascensores emplean la tecnología Destination Dispatch™ de ThyssenKrupp Elevator, que utiliza un software inteligente capaz de asignar a los usuarios el ascensor más adecuado a su trayecto para llevarlos a su destino lo más rápido posible. Para conseguir estas mejoras, la empresa ThyssenKrupp ha contado con la colaboración de ocho países que han contribuido en el desarrollo de elementos claves de los ascensores, incluyendo cabinas, motores, cables y complejos softwares.