El curso de verano ‘Energía: nuevos actores, nuevas tecnologías’, organizado por la Fundación Gas Natural Fenosa, en colaboración con la Universidad de Barcelona, ha analizado los nuevos retos normativos y los avances tecnológicos en energías como la fusión nuclear, el biogás o la solar fotovoltaica. Además, el curso ha hecho un análisis de la trayectoria de los agentes implicados en el desarrollo tecnológico mundial.
El director general de la Fundación Gas Natural Fenosa, Martí Solà, el catedrático de Recursos Energéticos de la Universidad de Barcelona, Mariano Marzo, y la vicerrectora de Relaciones Institucionales y Cultura de la Universidad de Barcelona, Lourdes Cirlot, fueron los encargados de inaugurar el curso, en el que participan más de 120 profesionales.
El Global Leader Energy Practice de Boston Consulting Group, Iván Martén, abrió las jornadas con una ponencia en la que puso en valor la constante evolución tecnológica del sector energético. Un desarrollo que se hará notar en los mercados de eficiencia energética de Europa y EEUU, que crecerán a doble dígito hasta 2020. De tal manera que el mercado de eficiencia energética pasará de los 13.800 millones de euros en 2012 a los 29.500 millones en 2020 en Europa, mientras que en EEUU pasará de los 7.500 millones de dólares en 2012 a los 19.900 millones en 2020, según datos de Pike Research recogidos por Boston Consulting Group.
Martén subrayó que el número de patentes tecnológicas registradas en el sector energético se ha multiplicado por dos entre 1990 y 2010; y, en el caso de las tecnologías limpias, el número de nuevas patentes se ha multiplicado por siete. En este sentido, apuntó también que el gasto público en I+D en medidas de eficiencia energética a nivel mundial ha pasado de 1,5 billones de dólares al año en 2005 a cerca de cuatro billones en 2013.
Políticas que estimulen la innovación
El profesor propio ordinario de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería ICAI-IIT e investigador asociado de la Kennedy School y del MIT CEEPR de la Universidad Pontificia Comillas, Pedro Linares, explicó que España es un país en el que la innovación es crítica para reducir nuestra dependencia energética o para desarrollar actividad industrial.
Nuestro país cuenta con buenas condiciones en algunas áreas, afirmó Linares, pero hace falta un esfuerzo importante para desarrollar políticas que estimulen adecuadamente la innovación de manera sostenida en el tiempo. Estas medidas deberían incluir un análisis de carácter estratégico, la promoción de la iniciativa privada, la mejora del diseño institucional, una buena coordinación con otras políticas, y un esfuerzo de educación y comunicación a la sociedad.
El catedrático de Recursos Energéticos de la Universidad de Barcelona y director de este curso de verano, Mariano Marzo, explicó que los avances conseguidos en tecnología para la extracción de los recursos energéticos hacen posible disponer de nuevas reservas energéticas de difícil acceso, y detalló que para realizar la extracción es necesario invertir más energía, aunque se incrementarán los costes y el impacto ambiental.
España, séptimo productor de biogás
La responsable de proyectos de biogás de Gas Natural Fenosa, María Piedad Martínez, presentó los costes, el grado de implantación en el mercado, los principios de funcionamiento, las características generales, las ventajas e inconvenientes de las diferentes tecnologías disponibles para la producción de biometano a partir de biogás y biomasa sólida. Martínez destacó la potencia de España como productor. De acuerdo con los datos del barómetro EurObserv´ER, nuestro país es el séptimo productor europeo de biogás y cuenta con un potencial de energía disponible de cerca de 20.000 GWh anuales.
El director general de Gestión Técnica del Sistema de Enagás, Diego Vela, analizó los retos normativos y técnicos de inyectar biogás a la red. Entre las ventajas de esta técnica destacó su contribución a la mejora de la seguridad de suministro, la disminución de la dependencia energética y su aportación para lograr los objetivos medioambientales de la Unión Europea. A su vez explicó que existen casi 13.000 plantas de biogás en operación en Europa, de las cuales más de 170 acondicionan la calidad del gas a biometano para su inyección en las redes de gas natural.