El Hospital granadino de Baza ha llevado a cabo actuaciones en materia de ahorro, eficiencia energética y energías renovables fruto del convenio alcanzado entre la Consejería de Economía, Innovación y Ciencia, a través de la Agencia de la Energía y el Servicio Andaluz de Salud para acometer mejoras en materia energética en 14 centros hospitalarios públicos andaluces.
En la actualidad, los centros sanitarios utilizan en torno a un 7% de sus recursos de gestión a financiar el consumo de energía. Para lograr una mayor eficiencia energética y beneficios tanto económicos como ecológicos, se ha procedido a sustituir calderas y plantas enfriadoras de bajo rendimiento por otras más eficientes; cambiar las antiguas torres de refrigeración por unas nuevas de más alto rendimiento e implantar sistemas de trigeneración, destinados a la obtención de calor, frío y electricidad de forma simultánea y capaces de cubrir entre el 50 y el 60% de las necesidades de agua caliente, calefacción y refrigeración. Además, se han instalado paneles de energía solar térmica para la obtención de agua caliente sanitaria.
Entre las ventajas del uso de gas natural desde el punto de vista medioambiental destaca el hecho de que emite un 18% menos de CO2 que el gasóleo a la atmósfera, se caracteriza por la ausencia de cualquier tipo de impurezas y residuos, lo que descarta cualquier emisión de partículas sólidas, hollines, humos, etc., y tiene un contenido en azufre inferior a las 10ppm (partes por millón) en forma de odorizante, por lo que la emisión de SO2 en su combustión es 150 veces menor a la del gas-oil. La producción solar no tiene emisiones a la atmósfera, por lo que el kilovatios/hora generado de energía es totalmente limpio.