La Xunta de Galicia, a través del Inega, ha presentado cuatro convocatorias de ayudas que tienen como objetivo impulsar el uso de energías limpias y un mejor aprovechamiento de los recursos energéticos. En concreto, se trata de una convocatoria para promover la eficiencia energética entre empresas y autónomos; una segunda para el uso de energías renovables entre familias y pymes, sobre todo en el ámbito rural; y dos más para proyectos de biomasa en empresas, administraciones públicas y entidades sin ánimo de lucro, por un lado, y para los que ejecutarán particulares en sus viviendas, por otro.
Las convocatorias han sido presentadas recientemente por el director general de Energía y Minas, Ángel Bernardo Tahoces. En total, la Xunta concederá ayudas a más de 1.800 proyectos, con un importe global de 13,5 millones de euros, lo que permitirá movilizar 50 millones y proporcionará a los beneficiarios un ahorro estimado de 8,5 millones al año. Además, supondrá reducir en más de 30.000 toneladas anuales las emisiones de CO2.
Energías renovables
La tercera orden de ayudas (DOG del 28 de junio de 2016) corresponde a proyectos dinamizadores que se desarrollarán en las áreas rurales de Galicia y que permitirán la instalación de equipaciones de energías renovables, en concreto, de geotermia, aerotermia y solar térmica. En total, son 195 proyectos, que serán desenvueltos por 168 familias, 15 pymes y 12 administraciones locales, y que recibirán ayudas por un valor total de 1,17 millones de euros. En concreto, la inversión concedida por el Inega contribuirá a ejecutar 82 iniciativas de aerotermia, 79 de geotermia y 34 de solar térmica.
La cuantía de las ayudas oscila entre el 40% y el 75%, con un máximo de 50.000 euros para proyectos relacionados con la geotermia y de 20.000 para la aerotermia y la solar térmica. Las actuaciones se enmarcan dentro del Plan de Ahorro y Eficiencia Energético de la Xunta que tiene como prioridades fomentar la implantación de equipos de última generación; reducir la factura energética de las familias, que puede llegar hasta el 70% en el caso de la geotermia y la aerotermia; y disminuir el consumo de energías convencionales.
Eficiencia energética
La cuarta orden de ayudas concedidas (DOG del 16 de junio de 2016) corresponde a la resolución de la convocatoria para lo programa de eficiencia energética, dirigida a empresas y autónomos. Es la que aporta más fondos, con 5,3 millones de euros para la ejecución de 231 proyectos. La mayoría de las iniciativas (208) se centran en la instalación y renovación de equipos que permiten el ahorro y mejor aprovechamiento de los recursos energéticos. En esta orden, además, se incluyen 19 ayudas para elaboración de auditorías energéticas que evalúen el proceso productivo en los centros de trabajo y propongan medidas de reducción del consumo; otras dos para el relevo de vehículos a gasóleo o la gasolina por otros que empleen energías limpias como gas natural, GLP o hidrógeno; y dos más para la implantación de sistemas de gestión energética certificados conforme a la norma ESO 50.001.
Las ayudas permiten sufragar hasta el 30% del coste del proyecto, con un máximo de 200.000 euros por iniciativa, un porcentaje que alcanza el 40% en los casos en los que los beneficiarios sean las pequeñas y medianas empresas.
Biomasa
Las ayudas a proyectos de biomasa están recogidas en dos resoluciones, DOG del 23 de junio de 2016, para empresas, administraciones públicas y entidades sin ánimo de lucro, y la DOG nº 123 del 30 de junio de 2016, para particulares.
Esta tercera convocatoria de inversiones para la biomasa permite dar continuidad al trabajo realizado durante los años 2014 y 2015, cuando las ayudas concedidas contribuyeron a la instalación de 2.000 calderas de biomasa.
Este programa de ayudas favorece el impulso de la competividad en la industria y el sector servicios, dentro de la línea fijada en la Agenda de la Competitividad Galicia-Industria 4.0. De hecho, la previsión es que con esta nueva convocatoria se movilicen 30 millones de euros; que las emisiones de CO2 desciendan en 10.400 toneladas al año, ahorrando a las empresas 5,8 millones de euros al año en el abastecimiento energético; y que se creen cerca de 250 puestos de trabajo, entre directos e indirectos.