La ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, ha sido la encargada de inaugurar la jornada «La Cumbre del Clima de Marrakech: un análisis de resultados y sus implicaciones para España”, en ella ha subrayado el amplio respaldo internacional al Acuerdo de París para luchar contra el cambio climático.
En este contexto, García Tejerina ha valorado los resultados de la Cumbre de Marrakech (COP22). A este respecto, ha explicado que en Marrakech se ha reafirmado el cumplimiento del objetivo de movilización de 10.000 millones de dólares para la lucha contra el cambio climático en los países en desarrollo.
García Tejerina se ha referido a la adopción de la Declaración política de Marrakech, que recoge la determinación de la comunidad internacional para mitigar y adaptarse al cambio climático. Por otra parte, ha destacado la movilización “sin precedentes” de toda la sociedad civil, con la puesta en marcha de un gran número de actuaciones. Entre ellas, se ha lanzado la “Alianza de Marrakech por la Acción Climática Global”, cuyo objetivo es canalizar las iniciativas de los agentes gubernamentales y no gubernamentales para la consecución de los compromisos acordados en París.
España muestra su apoyo en la lucha contra el cambio climático
La Ministra ha destacado la participación española en los encuentros relacionados con áreas para la lucha contra el cambio climático. Entre ellos, el Plan de Acción de la Estrategia 5+5, en materia de agua; la asistencia a la primera reunión del Consorcio de la Iniciativa 4X1000, para contribuir a fijar carbono de la atmósfera en los suelos y la biomasa; y la firma de una declaración política, junto con Alemania, Marruecos, Francia y Portugal, sobre intercambio energético. También ha dicho que las interconexiones de España con Europa favorecen la integración de más generación renovable, mejora la seguridad de suministro, fomentar la competitividad y garantizar la sostenibilidad ambiental.
Por otra parte, García Tejerina ha calificado de determinante el papel de España y de la UE en la negociación internacional. En particular, el objetivo de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero de la UE es de, al menos, un 40% de reducciones domésticas, en 2030, con respecto a 1990. En el caso de España, el objetivo se traduce en una reducción del 26% de las emisiones de gases de efecto invernadero en los sectores difusos, en 2030.